Equipo Nizkor - Empieza la cuenta atrás y a Ucrania se le viene encima el Nord Stream 2.

Se prevé que el gasoducto Nord Stream 2 se finalice en 2019 y esas son malas noticias para Ucrania, que no se ha preparado para las consecuencias negativas de su construcción. Alan Riley, experto en Derecho de la competencia en la Universidad de la City de Londres, analizó en el periódico Evropéiskaya Pravda lo que se le viene encima a Kiev.

"La mayoría de quienes analizan las consecuencias negativas de su construcción ponen énfasis en que Ucrania perderá más de 2.000 millones de dólares por el tránsito de gas a través de su territorio", señala Riley. Y es que el gasoducto del Nord Stream 2 pasará por el mar Báltico partiendo desde Rusia hasta llegar a Alemania, para luego repartirse por la Unión Europea. Por ahora, parte del gas natural que consume el viejo continente llega a través de Ucrania.

"Pero existen otros problemas a tener en cuenta, con los que Ucrania puede toparse en caso de que el proyecto acabe siendo una realidad", advierte el británico.

Riley se refiere a que Ucrania no solo perderá esos millones, sino también el propio gas que pasa por ella. "El país utiliza para uso propio parte de ese mismo gas", señala. Como consecuencia, una porción importante de la red de tuberías de gas natural acabará colapsándose hasta tal punto que no será posible restaurarla, añade.

Si se llega a ese escenario, el precio por la red de tuberías de gas natural ucraniana no será "mucho mayor que el de la chatarra". De construirse, Ucrania dejará de ser país de tránsito del gas natural ruso.

Pero Riley señala que ahí no se acabarían los problemas para Kiev.

"En los tres últimos años, la empresa ucraniana Naftogaz ha jugado un papel importante en el tránsito inverso de gas natural a Ucrania –es decir, en el tránsito no de Ucrania a Europa, sino de Europa a Ucrania–. Sin embargo, que haya tránsito inverso para Kiev solo es posible si Europa recibe suficiente gas ruso. Si Eslovaquia, Polonia y Hungría empiezan a recibir gas natural de otra forma –empezando desde Alemania y a través del Nord Stream 2–, que Ucrania reciba gas desde el oeste pasará a ser mucho más difícil" advierte Riley.

El Nord Stream 2 cambiará las reglas del juego. La rusa Gazprom, que junto a otras controla EUGAL –'European Gas Pipeline Link' –el tramo alemán del proyecto–, puede reducir el suministro de gas a aquellas compañías que abastezcan a Ucrania. Que las empresas europeas le pasen gas al país no les saldrá a cuenta.

A Kiev se le acaba el tiempo. El gasoducto debería de acabarse a finales de 2019. El experto indica que el país deberá, en menos de dos años, protegerse de la amenaza que se le viene encima.

"A Ucrania le conviene centrarse ahora en reformar su industria energética: debería diseñar lo antes posible un mercado energético que cumpla con los estándares internacionales a fin de atraer inversión y tecnología que aumente su producción [de gas] nacional", subraya.

Esta decisión de Rusia fue tomada como respuesta a las acciones de Kiev que amenazaban el paso del gas ruso por territorio ucraniano. En 2014-2015, las autoridades ucranianas llegaron a planificar la explosión de un gasoducto ruso que pasaba a Europa a través de su territorio. Esto fue anunciado por el viceministro para territorios no controlados por Kiev, Yuri Grimchak, en el canal de televisión ucraniano Zik.

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Empieza la cuenta atrás y a Ucrania se le viene encima el Nord Stream 2

[Fuente: Sputnik News, Moscú, 19ene18]

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