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01dic14
Cuarenta detenidos tras una noche de caos en Hong Kong
Miles de estudiantes se enfrentaron con la policía forzando a cerrar las oficinas gubernamentales en unos choques fragorosos que indican que la paciencia en ambos bandos se está empezando a agotar tras más de dos meses de protesta.
La violencia emergió cuando los estudiantes cumplieron la amenaza de rodear las sedes gubernamentales en la zona de Admiralty y la policía los repelió.
Las escenas de lucha son ya habituales en Hong Kong, con los estudiantes defendiéndose con sus icónicos paraguas y cascos y los policías armados con porras y espráis de pimienta.
Centenares de agentes han repelido a los estudiantes primero con cañones de agua y después con el material antidisturbios en unos enfrentamientos que se han alargado durante toda la noche.
La prensa local señala que ha habido decenas de heridos en ambos bandos y los servicios médicos han atendido a algunos que estaban tendidos inconscientes en el suelo o que tenían la cabeza ensangrentada.
La policía ha señalado que ha practicado 40 detenciones y que 11 de sus agentes han resultado heridos.
La iniciativa de rodear las sedes gubernamentales había sido anunciada anoche por los líderes estudiantiles ante la muchedumbre que se había citado en Admiralty como respuesta a la falta de respuesta de las autoridades de Hong Kong a sus pretensiones democráticas.
Alex Chow, secretario general de la Federación de Estudiantes de Hong Kong, ha explicado que la vuelta de tuerca en la campaña de desobediencia civil se debe a la inacción política.
"El Gobierno está detenido… y creemos que tenemos que focalizar en la presión a sus sedes porque son el símbolo del poder gubernamental", declaró.
Leung Chun-Ying, jefe ejecutivo de la excolonia, ha advertido hoy que la contención de las fuerzas de seguridad de las semanas anteriores ha llegado a su fin.
"Muchos han malinterpretado la tolerancia policial con debilidad (…) Pido a los estudiantes que pensaban en volver a las protestas esta noche que no lo hagan", ha dicho en rueda de prensa.
Los últimos enfrentamientos en una crisis que ha sido pacífica y lúdica durante la mayor parte del tiempo revela la frustración de ambos bandos: por una parte, los estudiantes no han recibido ningún fruto a pesar de protagonizar las mayores protestas que se recuerdan en la excolonia; por la otra, la estrategia gubernamental de que el movimiento se agote por el simple paso del tiempo se ha revelado como demasiado optimista.
La prensa local señala que el ambiente en la zona de protesta de Admiralty vuelve a ser tan tenso como en los primeros días después de varias semanas en las que el movimiento había perdido fuelle.
Los funcionarios de Hong Kong han limpiado de manifestantes en las últimas semanas la zona de Mong Kok y áreas de Admiralty en cumplimiento de órdenes judiciales que han encrespado los ánimos de los estudiantes.
Pekín sigue evitando la intervención internacional en un conflicto que reclama como interno.
China ha advertido a un grupo de legisladores británicos que prohibirá su entrada si pretenden investigar las relaciones entre Londres y su excolonia.
Los estudiantes y la plataforma cívica Occupy Central pretenden que el sufragio universal de 2017 se celebre con libre designación de candidatos y sin el filtro que impone Pekín al entender que ese sistema es una "farsa de democracia".
[Fuente: Ria Novosti, Pekín, 01dic14]
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