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29oct12
Sistema sanitario hondureño en cuidados intensivos
La huelga que mantienen los médicos en los hospitales públicos del país, ha vuelto a desnudar la condición crítica, agonizante del sistema sanitario público del país donde los medicamentos y otros insumos médico quirúrgicos son muy escasos al tiempo que se libra un conflicto casi permanente por las demandas salariales de la variedad de gremios que predominan en el sector salud.
Ya este fin de semana, más de 14 mil consultas se habían dejado de atender y cuatro mil operaciones selectivas fueron sido suspendidas en los hospitales estatales del país debido a la huelga de médicos, que reclaman el cumplimiento salarial de parte del gobierno, sin que se vislumbre todavía una solución al conflicto que afecta a millares de pacientes de todo el país que acuden a los centros asistenciales en busca de salud.
Al par, los actos de corrupción en el sector salud que se han denunciado en los últimos años, parecen no afectar a sus protagonistas. Algunos de los personeros han dejado sus cargos y corren en la búsqueda de una butaca parlamentaria, otros permanecen en impávidos en sus puestos. Nada parece tocarles y no se evidencia asomo de que la ley legue a alcanzarles.
Falta de insumos hospitalarios es preocupante
Pero los galenos no solamente reclaman al gobierno, el pago de sus salarios, sino que también protestan por la falta de materiales médicos como jeringas, guantes y otros insumos hospitalarios descartables. Además, exigen abastecimiento de medicamentos en los centros asistenciales del país, donde los estantes están casi vacíos.
Son unos dos mil 500 médico los que reclaman al gobierno la falta de materiales sanitarios como jeringas, guantes y, además, exigen un abastecimiento de medicamentos en los 28 hospitales estatales y 256 centros de salud del país.
El presidente del Colegió Médico de Honduras (CMH), Elmer Mayes, dijo que "trabajamos en una situación de calamidad, a veces porque no queremos quejarnos no decimos la realidad en la que tenemos que atender las consultas", subrayó Mayes
Mayes indicó que la situación es patética en los 28 hospitales públicos que funcionan a nivel nacional, aunque lo más se afronta en los centros asistenciales de la norteña ciudad de San Pedro Sula, la segunda más importante de Honduras, debido a la escasez de insumos, lo que incluso se extiende a otras ciudades como El Progreso, Yoro.
Ejemplificó que hospitales como el Mario Catarino Rivas de San Pedro Sula, carece de un componente elemental como el oxigeno, por lo que se está comprando diariamente ese insumo, y se corre el riesgo que un día no haya dinero para adquirirlo.
Añadió que en el hospital de la ciudad de El Progreso, no hay existencias de ciertos antibióticos necesarios para atender a aquellos pacientes que llegan con fiebre.
El presidente de la Asociación de Médicos Especialistas del Hospital Escuela de Tegucigalpa, Denis Chirinos, aseveró que el centro hospitalario "está en un colapso total" y, además, denunció que ante la falta de materiales, en muchas ocasiones, las jeringas "son reutilizadas". Esta denuncia fue contravenida por autoridades sanitarias que salieron al paso.
"El Colegio Médico ha iniciado esta lucha, pero el pueblo hondureño debe unirse a los reclamos para que las autoridades se pongan la mano en la conciencia y abastezcan los hospitales con medicamentos y todo lo que se necesita para atender mejor a los pacientes", agregó Chirinos.
Por su parte, Mayes aseveró que "se están aplicando medicamentos oncológicos mezclados con la misma jeringa porque no hay los suficientes, eso es ridículo a estas alturas porque no es un práctica correcta de la medicina; es como que alguien quisiera abrir un paciente con una "Gillette" en vez de usar el bisturí", ejemplificó, al tiempo que agregó que "se puede hacer y si se aprende a hacerlo no pasa nada, pero no es la práctica de la medicina, para eso hay protocolos antiguos".
Los miembros de la junta de dirección del Hospital Escuela, aclararon que no es cierto que se estén reutilizando jeringas en el centro asistencial, como lo aseguraron los doctores Chirinos y Mayes y todavía esperan que ambos galenos se retracten de sus aseveraciones.
Esclarecieron que con los pocos fondos que les ha transferido la secretaría de Finanzas, hasta el momento han priorizado para la compra de material quirúrgico, entre el cual se encuentran las jeringas.
Asimismo, dejaron claro a los médicos en huelga que esa acción no se puede realizar contra un hospital que está bajo una situación de emergencia de acuerdo a un decreto emitido por le gobierno y que cuya administración le pertenece a la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), y le sugirieron al presidente del Colegio Médico, que se asesore legalmente, ya que la acción que han emprendido no es legal, adujeron.
Los miembros de la junta de dirección del centro asistencial no quisieron aclarar si habrá despidos de médicos, pero se maneja que las actas que se levantarán van en contra de Mayes y Chirinos.
Acuerdo está lejos de lograrse
Mayes, dijo que "aún está lejos" un acuerdo para solventar el conflicto laboral con el gobierno porque "no existe voluntad de parte de las autoridades de Salud".
"Siento que la secretaría de Salud no tiene la voluntad para lograr un acuerdo con los médicos, este problema no se va a solucionar hoy, no se va a solucionar mañana, pero queremos que haya voluntad de todas las partes para que nuestro pueblo pueda tener lo que necesita", subrayó Mayes.
Sin embargo, las autoridades sanitarias aseguran que ya hicieron efectivo el pago de los salarios atrasados, algunos desde 2011, a unos 800 galenos y que no entienden por qué los médicos continúan en huelga.
Mayes indicó que una comisión del Colegio Médico se reunirá este lunes con las autoridades de Salud para "seguir negociando" y ver si logran llegar a un acuerdo que les permita retornar a sus labores.
Los médicos también exigen que se cancele una medida fiscal encaminada a contener y reducir el gasto público, aprobada en agosto pasado por el gobierno, que les reduce en 11% el sueldo a los galenos que ganan más de 50 mil lempiras mensuales.
Según cifras oficiales, con el paro de los médicos se han dejado de atender más de 14 mil consultas y más de cuatro mil cirugías han sido canceladas.
El presidente Porfirio Lobo, cuestionó la semana pasada la "impresionante indolencia" demostrada por los médicos en huelga y les advirtió que se "les aplicará la ley".
"No se debe jugar con la salud del pueblo, no se puede violentar ese derecho porque incluso están jugando con vidas humanas", agregó el mandatario.
La huelga también ha provocado que al menos 14 médicos que trabajan en el Hospital Escuela hayan sido sancionados por las autoridades de Salud.
Decreto de emergencia no fue la medicina
El 13 de abril de 2010, el Consejo de Ministros, decretó estado de emergencia en el sistema nacional de salud pública por la escasez de medicamentos, en el cuadro nacional básico de salud que lo conforman 420 medicamentos. La declaratoria de emergencia se realizó a petición del entonces ministro de Salud, Arturo Bendaña.
Al momento de decretar el estado de emergencia, el mismo Consejo de Ministros autorizó la compra directa de medicamentos por el orden de 200 millones de lempiras mediante el decreto PCM 012 - 2010 en el cual se detallan los procedimientos a utilizar para la compra directa.
Sin embargo, con la aprobación de ese decreto de emergencia, el problema lejos de resolverse se ha agudizado tal como se reflejó luego que la UNAH, asumiera la administración del Hospital Escuela. Y como se dio a conocer en un informe sobre la situación del ese centro hospitalario, brindado por la UNAH, en consejo de Ministros.
La organización social Transformemos Honduras, dio a conocer públicamente cómo se ha venido incurriendo en una serie de irregularidades en la compra directa de medicamentos, lo que va en menoscabo de la transparencia con que debió manejarse ese proceso.
Bendaña tomó posesión de la secretaría de Salud, el 29 de enero de 2010. En las primeras semanas de su gestión se dedicó a visitar los hospitales más concurridos por la población como el Mario Catarino Rivas y el Hospital Escuela. Además de la información proporcionada por la administración anterior, más las visitas a los hospitales en mención, se demuestra que desde los primeros días de su gestión, tenía pleno conocimiento del estado de abastecimiento de los medicamentos en general.
Pese a que Bendaña, tenía un conocimiento de la situación de los hospitales, no inició ninguna licitación ni convocó ninguna comisión sino que esperó más de 100 días para solicitar al presidente Lobo el estado de emergencia en el sistema de salud.
El ex funcionario expuso ante el Consejo de Ministros la grave situación que atraviesan los hospitales públicos de Honduras, donde de 430 medicamentos, únicamente hay 110 del cuadro básico, lo que pone en riesgo la vida de pacientes con enfermedades crónicas como la hipertensión, diabetes, cáncer, enfermedades renales y VIH.
En resumen, según Transformemos Honduras, nunca existió una justificación real para una compra por emergencia. Bendaña tenía previo y pleno conocimiento de la situación, pero aduciendo falta de tiempo, prefirió solicitar una compra de emergencia, pese a el 10 de febrero de 2010, el ex ministro de Salud, expresó públicamente que su administración no recurriría a compras por emergencias como se había hecho en el pasado, y que las adquisiciones sería mediante licitaciones normales, vigiladas por la sociedad civil.
Se ha venido haciendo negocio con los sobreprecios
En el sistema de salud hondureño también se ha venido denunciando el sobreprecio que se paga en la adquisición de medicamentos. En una selección de 22 medicinas, el ministerio de Salud pagó casi 18 millones de lempiras en vez de los 7.8 millones que según la Organización Mundial de Salud (OMS) son los precios promedios mundiales.
Entonces sólo en estos 22 medicamentos, el pueblo hondureño pagó 10 millones más de lo que debió haber erogado.
Un ejemplo que presentó Transformemos Honduras, fue la compra de penicilina cristalina 10,000.000 UI FC a la sociedad Grupo G y G por un precio de un millón 488 mil 240 lempiras, pero si se hubiera comprado al precio promedio a nivel mundial de la OMS sólo hubiera sido 85 mil 180 lempiras, tan sólo el 6% del total pagado.
La corrupción y falta de transparencia en la adquisición de medicamentos en los hospitales públicos quedó en evidencia luego que la UNAH, asumiera la administración del Hospital Escuela.
Atención en Hospital Escuela ha mejorado
Precisamente la presidenta de la junta de dirección del Hospital Escuela, Elsa Palou, aseguró que pese a las condiciones en que se recibió este centro asistencial, se ha ido avanzando y que los contratiempos se deben a la falta de transferencias del gobierno.
"Recibimos un hospital colapsado, tenía que hacerse una entrega de julio a diciembre de 172 millones de lempiras y hasta el momento se han entregado 30 millones, pero a pesar de la crisis económica se han logrado abrir quirófanos nuevos, se abrió uno por la tarde y con eso logramos triplicar las cirugías en la emergencia de adultos", explicó la funcionaria.
Agregó que de 34 cirugías que se hacían en julio, en el mes de septiembre se lograron hacer 95. "Se logró abrir la emergencia de pediatría que había estado cerrada durante varios meses, asimismo el aula magna que tenía más de un año de ser utilizada como bodega, se logró recuperar y está siendo de mucho utilidad en el hospital", remarcó.
Explicó que han logrado ahorrar 7.5 millones de lempiras en las compras de los últimos tres meses porque se ha implementado un mecanismo mucho más transparente.
La doctora Palou detalló que con los 30 millones de lempiras que se le entregaron, han amortizado deudas a proveedores de insumos y medicamentos. "Obviamente sabemos que hay carencia de estos, pero en la medida que se nos transfieran los fondos para poder cancelar deudas, en esa misma medida se suplirán las carencias", afirmó.
Sobre el paro de los médicos, dijo que la asamblea del Colegio Médico declaró una huelga por incumplimiento de pagos de salarios contra la secretaría de Salud, pero no contra la UNAH, ya que estos no tienen ninguna deuda.
"El Hospital Escuela tiene una declaratoria de emergencia declarada en Consejo de Ministros en agosto, por lo tanto si la huelga no es contra la UNAH y el Hospital Escuela está en una declaratoria de emergencia, no es legal que se vaya a huelga un médico dentro de este centro", arguyó.
Manifestó que "se trata de un problema que dejó la gestión anterior de la secretaría de Salud, pero tampoco se puede hacer huelga en un hospital colapsado y que tiene un decreto de emergencia".
"A la población que visita diariamente el Hospital Escuela le podemos decir que en estos días de huelga hemos resuelto la situación, se ha dado atención en consulta externa, en emergencias… vamos a seguir haciendo los esfuerzos porque se les siga atendiendo y esperamos que se continúen con las transferencias de Finanzas a la UNAH para poder comprar los insumos en las cantidades que se necesitan", puntualizó Palou.
Hablan los pacientes
Las explicaciones de Palou van en consonancia con los pacientes que asisten al Hospital Escuela quienes a pesar de la huelga siguen siendo atendidos en la sala de urgencias y otras áreas de atención tal como lo manifestó a Proceso Digital Maura Zavala quien llegó a ese centro asistencial proveniente de la aldea, Casitas, Masaguara, Intibucá, para ser atendida por un fuerte dolor de cabeza.
"Si me han atendido los médicos, me hicieron exámenes y me dijeron que tengo un tumor en la cabeza, pero me dieron cita y me mandaron al hospital de La Esperanza", manifestó Zavala quien también aseguró que en el centro asistencial le brindaron medicamentos.
Asimismo, Fátima Palma, tía del joven Reyman Ramos Palma quien sufrió un accidente en motocicleta al ser embestido por un automóvil, dijo que su pariente fue llevado a la emergencia del Hospital Escuela y no se pueden quejar de la atención a pesar de la huelga de los médicos.
"No nos podemos quejar, le hicieron exámenes de rayos "X" y aquí llevamos los medicamentos que le recetaron", manifestó Palma.
La denuncia del presidente
Las expresiones de esos pacientes, contrastan con la denuncia que por dos días consecutivos ha venido manifestando el presidente Porfirio Lobo, en el sentido que una persona murió presuntamente por falta de atención médica.
Lo hizo el viernes durante la ceremonia de entrega de un paquete de leyes para reformar la seguridad pública en Casa Presidencial y lo volvió a denunciar el sábado en San Pedro Sula, cuando entregó el Bono 10 Mil Urbano en un centro educativo de esa ciudad.
Lobo volvió a relatar que el viernes cuando fue a una funeraria en Tegucigalpa a dar el pésame a la comisionada presidencial de la región central Soledad Funes Donaire por la muerte de un hermano de ella, en la funeraria habían dos velatorios, "entonces yo lógicamente entro y me encuentro con una esposa llorando la muerte de su esposo y me cuanta la señora que se llama Irían Lizardo, que su marido murió porque los médicos no la quisieron atender porque estaban en huelga, óigame usted, óigame usted, óigame".
En ese sentido, cuestionó que si el gobierno no complace a los médicos algo, "por qué va a pagar el esposo de esa señora por culpa del gobierno, no puede ser, si el pleito es con el gobierno, que agarren las horas libres y se vayan a plantar a Casa Presidencial o donde el ministro o donde quien sea para que les pague, pero no tienen que castigar a los enfermos, y así como murió Francisco Javier Pineda, el esposo de la señora Irán Lizardo, quizá así han muerto varios".
Por su parte, Mayes admitió que el señor Pineda efectivamente fue atendido en el Hospital Escuela, pero rechazó que haya muerto por falta de atención médica, ya que el paciente llegó con una deficiencia respiratoria severa y no fue posible salvarle la vida.
Al respecto, la rectora de la UNAH, Julieta Castellanos, dijo que no cree que el paciente haya fallecido por falta de atención en el Hospital Escuela ya que la sala de emergencia ha estado trabajando normalmente pese a la huelga de los galenos que no han abandonado esa área, pero anunció que se iniciará una investigación en ese caso.
De tal suerte que en Honduras la situación de la salud se encuentra como en una sala de cuidados intensivos… donde el remedio llegar a cuenta gotas…
[Fuente: Proceso Digital, Tegucigalpa, 29oct12]
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