01jun03

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El pueblo se levanta en defensa de sus bosques por el agua y la vida.

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Olancho, fuente de oxigeno y de vida por sus bosques y reservas naturales de valor inestimable, se encuentra una vez mas en el centro de la polémica.

El Estado de Honduras se comprometió ante organismos internacionales a respetar, proteger y conservar esa región que forma parte del "corredor biológico Mesoamericano". Sin embargo, los beneficios económicos que generan una oligarquía de poderosos explotadores a través de la expoliación ilimitada de los recursos naturales siguen prevaleciendo.

Los acuerdos y leyes conseguidos por las comunidades de Olancho se quedan todavía sin ninguna aplicación efectiva.

Eso conduce desde hace varios años a un enfrentamiento cada día mas violento entre los que luchan por el medioambiente y la sobrevivencia del pueblo y los que quieren solamente explotar las reservas naturales sin medir sus consecuencias a largo plazo: la desaparición total de la vida.

Para revindicar sus derechos, las comunidades y los movimientos populares, con el apoyo de la Iglesia Católica, están organizando una marcha desde la ciudad de Juticalpa hacia Tegucigalpa el 20 de junio, durante 7 días con charlas en cada aldea que se encontrará en el camino para pedir que no se corte ningún árbol durante un plazo de 10 años, y que se inicie una campaña de reforestación.

Vistas las amenazas e intimidaciones que siguen sufriendo los activistas ambientalistas, el COFADEH (Comité de Familiares de los Detenidos Desaparecidos de Honduras), que desde el principio acompaña esta lucha, hace un llamamiento internacional con el fin de demandar al gobierno de Honduras que:

Nunca más la corrupción sea el brazo derecho de los que tienen en sus manos el poder político y económico del país. Cumpla las leyes relativas al medioambiente y que el Estado de Honduras tome medidas efectivas en contra de todos los que explotan sin límite las reservas naturales, decretando una veda por 10 años. Apoye y proteja la integridad física y moral de todos los que están involucrados en la lucha por la sobrevivencia del medioambiente. En ese sentido queremos llamar la atención sobre el caso del Sacerdote Diocesano Andrés TAMAYO, líder de ese movimiento, el Padre Osmin FLORES, Orlando NAJERA, Isidro ZUNIGA y Gilberto FLORES amenazados a muerte públicamente.

Pedimos urgentemente a todos los organismos que apoyen al pueblo de Olancho enviando una carta dirigida al Presidente de la Republica de Honduras, al Presidente del Congreso y a la Secretaría del Medioambiente: el esfuerzo de la presión internacional parece indispensable para que por fin el pueblo consiga justicia y obtenga el respeto de sus derechos.

Es responsabilidad de cada ser humano velar sobre los valores fundamentales a raíces de la vida.

Esperando se queden pendientes de los acontecimientos de las próximas semanas,

Los agradecemos por la solidaridad que nos puedan demostrar.

Tegucigalpa, 1 de junio del 2003.
Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH)

Este documento ha sido publicado el 06jun03 por el Equipo Nizkor y Derechos Human Rights