03may03

---

Solicitan protección a sacerdotes de Olancho y la expulsión de la ONU del embajador norteamericano Dimitri Negroponte.

---

El Comité de Familiares de Detenidos-desaparecidos en Honduras (COFADEH) en relación a hechos lamentables ocurridos en las ultimas cuatro semanas, solicita lo siguiente:

Al Cardenal Óscar Andrés Rodríguez y al Obispo de Juticalpa, Monseñor Mauro Muldoon, pedimos su inmediata intermediación moral que asegure la vida de los sacerdotes Andrés Tamayo y Osmin Flores, además de las religiosas y celebradores de la palabra comprometidos con la defensa ambiental en Olancho, pues son objeto de amenazas a muerte e intimidaciones judiciales por bandas del crimen organizado disfrazadas de empresarios de la madera, en asociación con autoridades policiales y del Ministerio Público.

Este llamado lo hacemos para que la Iglesia asuma su compromiso de defender la vida de las personas y preservar la naturaleza, sin caer en la tentación de trasladar a los pastores a otras parroquias, pues ello seria interrumpir su misión profética en una zona que ocupa hombres con voz de anuncio y denuncia.

Al Ministro De Seguridad, Óscar Álvarez, con cuya secretaria ejecutamos actualmente un plan de educación en derechos humanos para agentes y oficiales policiales en Olancho, pedimos que remita a asuntos internos el comportamiento de los agentes Cobras asignados a la empresa Energiza, en Gualaco Olancho, particularmente el Agente Roger Herminio Lobo y el delegado de la Unión, Denunciado por el alcalde municipal como cómplice de los traficantes de madera.

Al Fiscal General, Roy Medina, pedimos la investigación de la Fiscal Ghia Leoni por su conducta parcial a favor de los intereses de los depredadores del bosque en Olancho y demandamos una investigación objetiva en otros casos bajo el conocimiento de dicha funcionaria en el Departamento de Olancho.

El COFADEH acoge con beneplácito la incorporación de Honduras a la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, pero espera que esa responsabilidad signifique entre otras acciones, las siguientes:

a) Expulsión de ese organismo mundial del nefasto ex procónsul, John Demetrio Negroponte, metido a presión después de los actos terroristas del 11 de septiembre, siendo uno de los responsables directos de las desapariciones forzadas en honduras, autenticas acciones de terrorismo estatal no castigadas todavía.

b) También esmeraríamos el envío al país de una nueva misión investigadora de la ONU que revele de una vez el origen y fin de las sistemáticas ejecuciones extrajudiciales de jóvenes, ex agentes y oficiales policiales e inclusive de empresarios implicados en delitos varios.

c) Apertura de una figura permanente que denuncie y corrija las violaciones a los derechos económicos por parte de grupos de poder locales y organismos financieros internacionales, que a base de impuestos a los pobres y condonaciones a los ricos están llevando al país a la ingobernabilidad social. Deberían saber que ninguna extensión al TPS o ningún tratado comercial podrán detener las olas de miseria que están levantando la pobreza y la incertidumbre.

d) Igualmente demandamos a la nueva representación hondureña en las Naciones Unidas una investigación sobre el uso de naves, armas y soldados estadounidenses en tareas de defensa propias de las fuerzas armadas de Honduras, pues de confirmarse reportes de prensa sobre operaciones militares de seguridad interior desde Palmerola y La Mosquitia estaríamos ante una nueva escalada de militarización extranjera en el país, sin aparentes justificaciones ideológicas, solo al amparo de convenios bilaterales irrespetuosos de la soberanía nacional.

DE LOS HECHOS Y DE LOS HECHORES, ¡¡NI OLVIDO NI PERDON!!
COFADEH
Tegucigalpa, MDC., 03 de mayo del 2003

Este documento ha sido publicado el 03may03 por el Equipo Nizkor y Derechos Human Rights