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06jun06
Continúa la violencia armada en Guatemala.
La imparable violencia que azota hoy a Guatemala continúa segando vidas y en las últimas horas alcanzó a un asesor del Congreso de la República, asesinado a balazos en una céntrica avenida de esta capital.
Edwin Saúl Martínez era asesor del tercer vicepresidente del parlamento, el diputado Rubén Darío Morales, y recientemente fue designado precandidato a la alcaldía del municipio de Jalpatagua, en el oriental departamento de Jalapa.
El político, del Partido de Avanzada Nacional (PAN), fue atacado desde dos lujosos vehículos cuando se disponía a ingresar a un restaurante, y las primeras investigaciones descartan el móvil del robo ya que todas sus pertenencias quedaron en el lugar.
En otro sector de la ciudad un grupo de pandilleros atacó a una familia y causó la muerte de ambos padres y heridas graves a una de las hijas.
Mientras, la policía investiga la identidad de dos hombres cuyos cuerpos fueron descubiertos dentro de un vehículo abandonado en un parqueo en esta capital, hecho similar a otro ocurrido el pasado fin de semana.
Durante la graduación de un grupo de policías, el ministro de Gobernación Carlos Vielmann reconoció que ese cuerpo es insuficiente para contener la violencia.
Según datos oficiales, de enero a abril de este año el departamento de Guatemala fue escenario de cuatro mil 247 casos de homicidios, robos, asaltos, violaciones, secuestros, desapariciones y violencia intrafamiliar.
Le siguen en peligrosidad los departamentos de Quetzaltenango, Escuintla, Petén, Jutiapa, Izabal y Chiquimula.
Un informe de la ONU señala entre las principales causas de la violencia la presencia de bandas de narcotraficantes en prácticamente todo el territorio nacional, así como la acción de grupos de sicarios y pandilleros juveniles.
De acuerdo con el Procurador de los Derechos Humanos, Sergio Morales, el gobierno debe enfrentar el problema de la violencia de manera integral y no sólo con medidas policiales.
Se deben atacar las causas que provocan los hechos delictivos, además de mejorar la educación, salud, vivienda y crear fuentes de trabajo, pues de lo contrario el flagelo continuará como una epidemia, señaló recientemente Morales.
[Fuente: Prensa Latina, Guatemala, 06jun06]
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