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25oct05


Un informe de Rabat reconoce que cuatro subsaharianos murieron por disparos de la policía marroquí.


Cuatro de los seis subsaharianos fallecidos durante el asalto masivo a la valla fronteriza de la ciudad autónoma española de Melilla el pasado 6 de octubre murieron por los disparos realizados por las fuerzas de seguridad marroquíes y los otros dos debido a "choques hemorrágicos causados por heridas múltiples", según un informe oficial divulgado hoy. El informe del ministerio del Interior insiste en que los agentes de las fuerzas de seguridad marroquíes actuaron en "legítima defensa" tras haber realizado algunos disparos intimidatorios.

El informe señala que quince agentes que se hallaban en tres puestos de vigilancia en la pineda de Rostrogordo, junto al vallado fronterizo entre Marruecos y Melilla, tuvieron que hacer frente a "varias oleadas de violencia" por parte de grupos de inmigrantes y asegura que algunos de los subsaharianos "iban armados con machetes, garrotes y otras armas blancas".

El informe oficial del ministerio marroquí del Interior indica a también que la nacionalidad de las seis víctimas mortales de lo que califica de "sucesos lamentables" no ha podido ser establecida hasta ahora, debido a que carecían de documentos de identidad.

Anuncia también que desde que comenzaron los asaltos masivos a los vallados fronterizos de las dos ciudades españolas del norte de Africa, Ceuta y Melilla, 17 miembros de las fuerzas de seguridad marroquíes han resultado heridos, "varios de ellos gravemente".

El informe insiste en que una "violencia particular" caracterizó los asaltos masivos contra el doble vallado fronterizo de Melilla que se produjo durante la noche del 5 al 6 de octubre pasado.

Violencia infrecuente

Explica que esta violencia "infrecuente" sorprendió a los quince agentes de las fuerzas de seguridad marroquíes que se hallaban en tres puestos de vigilancia en la pineda de Rostrogordo, que no disponían ni de miradores ni de "equipamientos especializados para afrontar asaltos de esa amplitud".

Subraya que, a pesar de los disparos intimidatorios, "los asaltantes forzaron el dispositivo de guardia, obligando a los centinelas marroquíes a hacer uso de sus armas, en situación de legítima defensa".

"Seis personas resultaron muertas, cuatro de ella por disparos rasantes procedentes de las fuerzas de seguridad marroquíes, y las otras dos fallecieron como consecuencia de choques hemorrágicos causados por heridas múltiples", añade.

El ministerio marroquí del Interior "deplora" el "cariz dramático" de estos acontecimientos y expresa su "vivo pesar" por la pérdida de vidas humanas.

Considera por último que sólo reconociendo los "errores de gestión" del fenómeno de la inmigración ilegal los diferentes países concernidos contribuirán, "como Marruecos", a diseñar un "tratamiento global basado sobre una cooperación franca y transparente, que aporte soluciones concretas y preserve la dignidad humana".

El pasado 21 de octubre, la Organización Marroquí de Derechos Humanos (OMDH) reclamó la publicación de los resultados de las investigaciones oficiales sobre la muerte de once inmigrantes irregulares subsaharianos.

La OMDH recordó que el pasado 29 de septiembre murieron cinco inmigrantes irregulares subsaharianos durante uno de los asaltos masivos al vallado fronterizo de Ceuta y que el 6 de octubre murieron otros seis en el de Melilla.

Advertencia del Supremo de Marrucos

Por otra parte, el presidente del Tribunal Supremo del Reino de Marruecos, Driss Dahak, afirmó ayer que la mayoría de los 18.000 inmigrantes subsaharianos que fueron apartados de la frontera marroquí volverá a intentar entrar en el país para pasar a Europa.

Dahak hizo estas afirmaciones durante la inauguración del curso "Hacia un derecho unitario europeo en materia de extranjería", que comenzó hoy en la capital lanzaroteña, donde medio centenar de magistrados abordarán hasta el miércoles diversos aspectos relacionados con el fenómeno de la inmigración.

Además de exponer a los magistrados españoles y a presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Francisco José Hernando, la evolución del sistema judicial marroquí, Driss Dahak se refirió al problema que su país afronta con la entrada de inmigrantes subsaharianos que intentan cruzar a España.

Dahak aseguró que el gobierno de su país realizó 25.000 detenciones de inmigrantes en la primera mitad del año y que desarticuló 210 redes de tráfico ilícito de personas.

Controlar 3.400 kilómetros de frontera

Pese a ello, Driss Dahak aseguró que el Reino de Marruecos no puede afrontar solo este problema, pues es "imposible" controlar 3.400 kilómetros de frontera marítima, además de la terrestre.

Como ejemplo, citó la operación que acaba de realizar Marruecos en la que participaron 1.200 personas con aviones y helicópteros para "limpiar" los bosques.

La operación, según explicó, permitió alejar de las fronteras marroquíes a 18.000 subsaharianos, pero afirmó que la mayoría de ellos volverá a intentar cruzar Marruecos. El presidente del Tribunal Supremo del Reino de Marruecos advirtió, en cualquier caso, que "mientras los países ricos no vayan a los países pobres, los países pobres seguirán yendo a los países ricos".

A este mensaje de Driss Dahak se sumó el presidente del CGPJ, Francisco José Hernando, quien aseguró que la solución definitiva de este fenómeno sobrepasa al plano judicial y "son las naciones, en el plano político, las que deben poner toda su voluntad".

[Fuente: Estrella Digital, Madrid, Esp, 25oct05]

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