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20abr16
La elección de la Mesa de la Diputación revela el aislamiento de Podemos
La sombra de la repetición de las elecciones el 26 de junio presidió este mañana la obligada elección de los 61 miembros de la Diputación Permanente del Congreso de los Diputados. Salvo la actuación conjunta de PSOE y Ciudadanos, fieles a su fallido pacto de investidura, cada partido fue a lo suyo, lo que motivó que los candidatos de Podemos a la vicepresidencia y la secretaría de la máxima dirección de la Cámara Baja en los periodos vacacionales o de ausencia de plenos por su disolución no fueran elegidos.
La Diputación Permanente se eligió como si la legislatura fuera a continuar su periplo normal de cuatro años, pero todos los presentes parecían saber que era un puro trámite constitutivo. De hecho, cada partido se votó a sí mismo salvo en el caso de Podemos, que contó con el apoyo de Compromís, insuficiente para alzarse con los cuatro puestos en juego, dos vicepresidencias y dos secretarías.
La prueba de que se trataba de un puro trámite fue que el órgano de máxima representación de la Cámara durante la ausencia de plenos quedó constituido sin debate y quedó formado por 21 miembros del PP, 14 del PSOE, 11 de Podemos, 7 de Ciudadanos, 2 de ERC, 2 de Democracia i Llibertat, 2 del Grupo Mixto y 1 del PNV. 60 en total a los que se suma el presidente de la Cámara, Patxi López, que sigue siendo la máxima autoridad del Congreso tanto en funcionamiento como si se disuelve.
Votándose a sí mismo, el PP colocó como vicepresidenta primera a Celia Villalobos y como secretaria primera a Alicia Sánchez Camacho. Detrás, la suma de 20 miembros de PSOE y Podemos sirvió para que la socialista Micaela Navarro sea la vicepresidenta segunda y el "naranja" José Ignacio Prendes el secretario segundo.
Por su lado, pese al apoyo de Compromís, que está en el Grupo Mixto, los candidatos de Podemos salieron derrotados y sin cargos. Carolina Bescansa sólo consiguió 12 votos y el representante de En Comú Podem, Josep Vendrell, alcanzó los 15, al parecer -porque el voto es secreto- apoyado por ERC y el PNV.
A la constitución de la Diputación acudieron todos los líderes de los grandes partidos salvo Mariano Rajoy. Pedro Sánchez, Pablo Iglesias y Albert Rivera depositaron su voto en las urnas con normalidad. Sánchez y Rivera, sonrientes y saludando al presidente. Iglesias lo hizo serio y sin saludar a López, quien recogía los votos detrás de las urnas.
Los ministros que formarán parte de la Diputación también se ausentaron y enviaron sustitutos provisionales. Bescansa olvidó votarse a sí misma y, haciéndoselo ver el presidente, fue a su escaño y regresó con la papeleta.
[Fuente: Por Raimundo Castro, República de las ideas, Madrid, 20abr16]
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