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01may13
58 bancos extranjeros quedan atrapados en el concurso de acreedores de Pescanova
Un nuevo misil acaba de impactar contra la Marca España: un total de 58 bancos extranjeros están atrapados en el concurso de acreedores de Pescanova, según el primer mapa de pasivo del que dispone la banca afectada por la crisis de la multinacional gallega. De los 3.000 millones de deuda bancaria de la compañía, más de 1.430 están en manos de entidades internacionales, el 47% del total, según señalan fuentes financieras consultadas.
Los créditos de Pescanova se encuentran muy atomizados; se reparten entre un total de 81 bancos, aunque el grueso de la deuda bancaria, más de 1.500 millones, está en manos de entidades españolas. Pero hay casi 23 bancos, la mayoría extranjeros, con menos de cuatro millones por entidad cada uno, algo atípico en una empresa tan grande y un concurso de acreedores tan relevante.
Ayer ya trascendió el primer cálculo del pasivo real de Pescanova. En total, la primera aproximación del mapa cifra la deuda financiera neta del grupo que hasta hace poco presidía Manuel Fernández de Sousa en 3.170 millones, el doble de lo que había registrado. Esta deuda todavía puede crecer de mano de la auditoría que está llevando a cabo KPMG, que, precisamente, busca irregularidades en la gestión.
El desastre financiero de Pescanova se extiende por todo el mundo de mano de las múltiples filiales que tiene el grupo y que mantenían una deuda cruzada que ahora ha aflorado. Pueden encontrarse entre los acreedores bancos japoneses, africanos, brasileños, centroamericanos, chilenos y argentinos, pero también italianos, franceses, alemanes y británicos. Asimismo, entre los perjudicados hay grupos financieros norteamericanos. Es decir, un auténtico roto a la imagen internacional de España. En las reuniones para salvar a Pescanova, la banca internacional condicionaba su apoyo a que Fernández de Sousa fuera relevado del cargo.
Este fracaso en el panorama global de la crisis se añade al de los accionistas de todo el mundo que se han quedado atrapados en una Pescanova suspendida de cotización, a lo que se suma que la gestión de su expresidente esté siendo investigada por la Fiscalía. Entre estos se encuentran la firma luxemburguesa Luxempart (5,8%), el fondo estadounidense Fidelity (1%) o los fondos Capital Research Management (3,4%) y Silicon Metal (5%).
Principales acreedores
Por orden de volumen, los principales acreedores son Banco Sabadell (222 millones), Banco Popular (165 millones), el heredero de las cajas gallegas y exaccionistas de Pescanova, NCG (161 millones), CaixaBank (157 millones), Deutsche Bank (130 millones), Caixa Geral (130 millones), Bankia (127 millones), el grupo italiano UBI Banca (126 millones), Liberbank (97 millones) y Commerzbank (96 millones).
Tras estos diez bancos con mayor volumen de créditos hay una auténtica miríada de entidades y financieras, la mayoría de ellas internacionales. Casi la mitad de los bancos acreedores de Pescanova tienen préstamos por valor de menos de 15 millones de euros.
Los bancos españoles han tenido que provisionar el 25% de estos créditos desde que Pescanova presentó concurso. Ahora habrá que ver qué volumen de quita deben asumir durante el concurso para garantizar la continuidad de la empresa.
EBITDA positivo
En el marco del nuevo mapa del pasivo de Pescanova se detalla que el EBITDA (beneficio bruto operativo) previsto para 2013 será positivo. Así, el EBITDA consolidado que se estima para el año en curso rondaría los 140 millones de euros, según fuentes financieras, una cifra inferior a los más de 180 millones que se preveía antes de que estallase la crisis del grupo pesquero.
Que el EBITDA sea positivo no quiere decir que la empresa pueda cerrar con beneficios. Al doblarse la deuda se incrementarán los costes financieros, por lo que las pérdidas del año pasado y del ejercicio en curso serán considerables.
En todo caso, hay que tener en cuenta que aún no han formulado las cuentas anuales, y que técnicamente sigue siendo BDO el auditor del grupo pesquero, hasta que no sea revocado formalmente en la junta de accionistas tal y como prevé la ley. Una de las últimas decisiones de Fernández de Sousa como presidente fue, precisamente, revocar a BDO, que se negaba a firmar las cuentas tal y como quería el hasta hace poco presidente de la empresa.
El aviso de Fernández Sousa
Ayer, el presidente Fernández Sousa envió un comunicado mostrando "su inquietud y preocupación por los graves efectos que la suspensión de las facultades de administración y disposición de los actuales administradores de la compañía tiene sobre la gestión diaria, que requiere de una alta especialización y conocimiento dada su complejidad y dimensión internacional".
Por ello pide un segundo administrador concursal, ya que Deloitte no entrará a gestionar la compañía hasta mañana, dejando a Pescanova "sin gestión ni dirección efectiva" durante una semana, según denuncia Fernández de Sousa.
El expresidente lamenta así que el juez que lleva el concurso haya cesado al consejo de administración. Otros, sin embargo, lo ven así. El presidente no ejecutivo de Banesto, Antonio Basagoiti, comunicó ayer que dimitía como consejero de Pescanova.
[Fuente: Por Marcos Lamelas, El Confidencial, Madrid, 01may13]
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