Información | ||
Derechos | Equipo Nizkor
|
29may14
Interior deja vía libre al hijo de Tejero para ascender a coronel pese a su fiesta del 23-F
El Ministerio del Interior considera que no existen motivos para impedir el ascenso del hijo del golpista del 23-F Antonio Tejero, el teniente coronel de la Guardia Civil Antonio Tejero Díez, pese a la comida "no autorizada" que este celebró el pasado febrero en el cuartel de Valdemoro para conmemorar la efeméride y a la que, además de su padre, también asistieron otros implicados en el levantamiento. A pesar de que tiene facultades para impedir esa promoción, Interior ha decidido no ejercerlas.
El jefe de la cartera, Jorge Fernández Díaz, anunció este miércoles en el Congreso a preguntas del Grupo Socialista que ordenó abrir una información reservada en cuanto conoció por la prensa que se había celebrado esa comida para averiguar si los hechos desvelados podían ser objeto de sanción. Sin embargo, el ministro anunció que de esas pesquisas "no se deriva responsabilidad disciplinaria alguna" y que, por tanto, el escándalo va a quedarse sin castigo.
Esa decisión deja vía libre a Tejero Díez para ascender a coronel, según las fuentes consultadas, una categoría superior a la que tenía su padre cuando protagonizó el asalto al Congreso. Aunque el ascenso se rige por criterios de antigüedad e idoneidad, la legislación permitiría a Interior frenar esa promoción si considerara que el candidato no reúne los requisitos necesarios para el nuevo puesto, según aseguran las fuentes consultadas por este diario. Pero el ministro del Interior reveló en la Cámara Baja que el hijo del golpista incluso ha sido "reevaluado para el ascenso".
La Dirección General de la Guardia Civil también podría frenar el ascenso de Tejero Díez con la apertura de un expediente disciplinario. Sin embargo, el ministro del Interior también recordó en el Congreso que lo único que ha hecho la institución que encabeza Arsenio Fernández de Mesa es abrir una información reservada de la que por ahora no se conoce ninguna consecuencia, menos aún de tipo disciplinaria.
Destitución paralizada por la Audiencia Nacional
En esas circunstancias, nada impide el acenso de Tejero Díez. Las fuentes consultadas aseguran que se producirá este mismo verano. Hasta el momento de la fiesta del 23-F, era el máximo responsable del Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) número 1, la sección de la Guardia Civil encargada de mantener el orden público en la zona centro de la Península. Cuando saltó la noticia, Interior decretó su destitución inmediata, pero el afectado recurrió la decisión a la Audiencia Nacional. El pasado 20 de mayo, la Justicia suspendió cautelarmente su relevo y ordenó que fuera readmitido en su puesto al considerar que el relevo debió ser adoptado por la Dirección General de la Guardia Civil y no por el Ministerio del Interior. La cartera de Fernández Díaz asumió el error de forma y lo readmitió, pero acto seguido lo envió en comisión de servicios a otro puesto en la Subdirección de Apoyo para evitar su vuelta al cuartel de Valdemoro.
El portavoz del Grupo Socialista en la Comisión de Interior, Antonio Trevín, reprochó a Fernández Díaz que ese error jurídico vaya a permitir que a Tejero Díez "le salga gratis" esa comida y denunció que, a pesar de las herramientas que el Gobierno tiene a su alcance, haya decidido no hacer nada para impedir que pueda continuar su carrera en la Guardia Civil sin ningún tipo de obstáculo.
Contradicción en los argumentos
La postura que ahora adopta el Ministerio sorprende porque contradice los argumentados que este organismo había expresado con anterioridad. Cuando El País reveló la existencia de esa controvertida fiesta, Interior anunció la destitución de Tejero Díez por haber "mantenido un almuerzo no autorizado en un acuartelamiento". Sin embargo, Fernández Díaz no considera ahora que esos hechos sean suficientes para iniciar un expediente sancionador. Afirma que tan sólo se acordó el cese del GRS número 1 "por una cuestión de confianza".
La Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC), la más representativa del Instituto Armado, ha criticado duramente que ese incidente se salde sin ningún tipo de reproche para su máximo responsable. A juicio de la AUGC, tanto Interior como la Dirección General de la Guardia Civil han "aplicado un doble régimen disciplinario, que les permite dejar sin sanción a Tejero Díez y facilitar su inminente ascenso a coronel, mientras castiga a los representantes legítimos de los agentes". "En los dos años y medio de legislatura, la Dirección General ha abierto 37 expedientes sancionadores a diferentes miembros de la asociación", asegura uno de sus portavoces, "pero considera que hacer una comida en un cuartel en honor del 23-F, pedir a los efectivos de la garita que no anoten las identidades de los invitados y utilizar a guardias como camareros no es suficiente para abrir un expediente sancionador".
[Fuente: Por José María Olmo, El Confidencial, Madrid, 29may14]
This document has been published on 30May14 by the Equipo Nizkor and Derechos Human Rights. In accordance with Title 17 U.S.C. Section 107, this material is distributed without profit to those who have expressed a prior interest in receiving the included information for research and educational purposes. |