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28abr10
La negativa de ERC a firmar el acuerdo deja al 'frente catalán' contra el TC en el aire
El frente catalán contra el Tribunal Constitucional puede hacer aguas. Y puede hacerlas porque entre los partidos que tenían que firmarlo no se ponen de acuerdo. En principio, el Parlamento catalán tendría que aprobar hoy por una mayoría abrumadora un documento donde se explicite pedir explicaciones o iniciar acciones, por parte de este órgano, porque casi la mitad de los miembros del TC están deslegitimados, que se han de cubrir las vacantes que tiene (cuatro de sus miembros tienen el mandato caducado), que el propio TC ha de declararse incompetente para resolver sobre el Estatuto catalán (precisamente porque, entra otras cosas, la mitad de sus miembros tienen su mandato caducado y además no se ponen de acuerdo) y para cambiar la ley orgánica del TC, con el fin de que no pueda sentenciar sobre un Estatuto que ya ha sido aprobado en referéndum y para que sus miembros tengan que abandonar su cargo seis meses después de que caduque su mandato.
Convergència i Unió (CiU) presentó estos puntos al Gobierno catalán y, aunque los socialistas tenían algunas reticencias en aceptar alguno, una reunión exprés que tuvo lugar ayer por la mañana entre José Montilla y Artur Mas desbloqueó la situación. "No estamos para salvarle los trastos a Montilla. Si quiere, que lo firme, porque son peticiones lógicas", declaró a El Confidencial un alto cargo de CiU. Lo que se pretende es que El TC pueda dictaminar "pero con legitimidad". Los partidos catalanes siempre han criticado que no se puede estar cuatro años para dictar una sentencia, dejar caducar el mandato de una gran parte del tribunal y luego participar en un "juego político en el que entran en juego los intereses de dos partidos", en referencia a PSOE y PP.
El documento en cuestión es bien visto por los partidos catalanes, pero Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) se descolgó en el último momento del mismo y se negó a firmarlo. ¿Por qué? "Votaremos a favor, pero que lo firmen los partidos que votaron sí al Estatuto", dicen fuentes de ERC. Además, el propio secretario general de Esquerra, Joan Ridao, subrayó ayer por la tarde que el texto fue negociado in extremis por Mas y Montilla. Aún así, advirtió que su partido votará a favor si se lleva al Parlamento para no romper el frente catalán.
"Que Montilla ponga orden"
Ante esta decisión, Convergència no se queda atrás. "Nosotros queremos firmar el documento con el Tripartito, es decir con el Gobierno catalán, que Montilla ponga orden dentro del Gobierno, porque es una incoherencia total", explica el portavoz parlamentario de CiU, Oriol Pujol, a El Confidencial. Y desde fuentes del PSC se argumenta que "estamos a la espera de que CiU nos diga algo, porque quienes nos hemos reunido hemos sido los partidos. El documento que salga ha de ser apoyado por partidos, no por Gobierno y oposición". El portavoz socialista, Miquel Iceta, señala que "en estos momentos, no podemos saber si CiU lo va a firmar finalmente".
En otras palabras, por parte de los socialistas, se echa la culpa a CiU y ERC. Por parte de CiU se echa la culpa a ERC y PSC. Por parte de ERC se echa la culpa a CiU y PSC. Pero todos quieren que el documento con los puntos anteriormente expuestos se presente en el Parlamento catalán para que la cámara legislativa autonómica los presente oficialmente ante las instancias pertinentes.
Varias fuentes consultadas por este diario señalan que hoy se dirimirá finalmente si el texto se firma o no, pero de no ser así el frente catalán quedaría malherido. "Cada uno por su razones, CiU y ERC se desmarcan del espíritu del documento", señala una fuente socialista, que subraya que "parece que la decisión sea una cuestión electoralista. A uno le da la sensación de que quieren actuar consecuentemente, pero que de cara a la galería pretenden dar la sensación de que rechazan una propuesta por cuestiones populistas, como si esto fuera a ir en contra de Cataluña, cuando es precisamente lo contrario: lo que se pretende es arreglar una situación que se generó aquí y que fue aprobada en referéndum, por el Parlamento catalán y por las Cortes".
Las mismas fuentes señalan que las negociaciones continuarán hoy antes de que el tema se llegue a tratar en la sesión plenaria del Parlamento catalán. Puede haber acuerdo, pero finalmente quedará aguado si no se firma el documento. Una votación en la cámara no tendrá la misma fuerza que un documento firmado por todas las fuerzas, entre otras cosas porque no tendrá la legitimación que da una firma estampada en él".
[Fuente: El Confidencial, Madrid, 28abr10]
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