Equipo Nizkor - La pandemia cambia de tendencia al extenderse la variante británica.

Cambio de tendencia de la epidemia en Catalunya. La bajada de la tercera ola se ha ralentizado los últimos dos o tres días. La tasa de reproducción (R) del virus vuelve a subir después de cuatro semanas de descenso. El Departament de Salut trabaja con la hipótesis de que sea efecto de la variante británica del virus, más contagiosa, y que ya causa el 32% de los nuevos casos. Esto amenaza la reducción de las restricciones que se planteaba para el próximo lunes y puede indicar el inicio de una cuarta ola epidémica.

Que "se aplane la curva de bajada" de la tercera ola "no es una buena noticia", reconoció ayer el secretario de Salut Pública, Josep Maria Argimon, quien dijo que todo son aún hipótesis y que la conselleria sigue "expectante" la evolución de los datos. Porque el punto de inflexión llega cuando la Generalitat debe decidir si rebaja las restricciones el próximo lunes. Se había apuntado la posibilidad de una apertura del cierre comercial. Ayer hubo una reunión y no se decidió nada. Se quería esperar a ver si ayer y hoy se consolida la tendencia negativa.

Los datos de Salut indican que ayer aún bajaron los casos, pero sólo un 0,9%, cuando las últimas semanas lo llegaron a hacer más del 6% y Salut esperaba que este fin de semana ya no hubiera más de 1.000 diarios. La incidencia a 14 días se redujo a 338 casos por 100.000 habitantes, pero la R subió dos centésimas, a 0,84, según la información que publica Salut en Dades Covid.

Si sigue por debajo de 1 significa que cada positivo contagia de media a menos de una persona y, por lo tanto, que el número de casos tiende a reducirse. Si sube por encima de 1, se producirá un nuevo aumento de casos. "La gran incógnita es hasta dónde subirá la R en los próximos días antes de volver a estabilizarse", señala Clara Prats, del equipo de biología computacional Biocomsc en la Universitat Politècnica de Catalunya.

La R bajó la semana pasada a 0,77, según un análisis de Biocomsc, que calcula la cifra eliminando las fluctuaciones de los fines de semana. El martes había subido a 0,85.

Un método de cálculo alternativo, que estima la R a partir de los resultados de los tests de antígenos y que tiene la ventaja de que muestra los cambios de tendencia de manera más precoz, apunta en la misma dirección: el número de reproducción del virus ha subido de 0,79 el martes 9 a 0,83 el día 16. Además, la positividad de los tests ha dejado de bajar, señaló Argimon. Todos los cálculos llegan a la misma conclusión: "El cambio de tendencia, aunque por ahora aún es pequeño, es inequívoco", declara Clara Prats. "Estamos -dice- en una fase de incertidumbre; no sabemos si las medidas que tenemos en vigor serán suficientes para mantener el número R por debajo de 1".

El número ingresados en hospitales por covid disminuyó ayer (2.181, 142 menos que el día anterior), así como en las ucis (612, siete menos), pero estas unidades de intensivos están muy llenas. Este es "el gran problema", dijo Argimon. Advirtió que, si empezara la subida de una cuarta ola epidémica, lo haría con las ucis el doble de llenas que en diciembre, ante la tercera ola. Entonces había 320 pacientes, que ya eran el doble que los 140 de antes de la segunda ola. El epidemiólogo se mostró preocupado pero no se atrevió a asegurar si estamos a las puertas de una cuarta ola.

El repunte de contagiosidad de los últimos días puede deberse a la implantación creciente de la variante británica, a las consecuencias de haber relajado un poco las medidas de prevención desde el 7 de febrero, o a una combinación de ambos factores, valora Prats.

Argimon precisó que no se piensa que "la causa principal" de que se aplane la curva de bajada de casos sea la reducción de las restricciones que se hizo el día 7, al ser muy ligera (ampliar dos horas la apertura de restaurantes, pasar del cierre municipal al comarcal y abrir los gimnasios). Es distinto de otras veces, cuando se abrían actividades y la R repuntaba, dijo. No se encuentra otra explicación que la variante británica, aunque Salut quiere analizar bien los indicadores.

En Barcelona ciudad, la variante ya origina el 32% de casos, como en la media de Catalunya, pero hay zonas donde causa más. En Osona, con muchos contagios (aunque la situación mejora), causa el 78%. Argimon estima que en dos semanas puede ser la variante dominante.

Una estimación inicial preveía que, si es entre un 35% y un 50% más contagiosa que las variantes anteriores, el número R debía subir a medida que la nueva variante se extendiera. Sin embargo, en las últimas cuatro semanas la R había bajado pese a que la variante británica se extendía, lo cual ha desconcertado a epidemiólogos, virólogos y técnicos del Departament.

Clara Prats observa que los países donde la variante británica ha causado estragos, como Inglaterra, Irlanda y Portugal, tenían medidas de prevención mucho más laxas que las que hay actualmente en vigor en Catalunya. "Posiblemente las medidas que tenemos estén ayudando a contener el impacto de las nuevas variantes", apunta.

Ante el dilema de si mantener o rebajar las restricciones el lunes, el jefe de epidemiología del hospital Clínic, Antoni Trilla, defiende que "es mejor ser prudentes. Si los indicadores no se estabilizan, me parece más sensato mantener las restricciones un tiempo corto y evaluar de nuevo si conviene cambiarlas. El sistema sanitario sigue muy cargado. Un nuevo aumento de casos ahora sería muy difícil de gestionar".

En la misma línea se manifestó ayer Jaume Padrós, presidente del Col·legi Oficial de Metges de Barcelona, quien declaró que "lo más sensato es mantener las restricciones una semana más".

18feb21

La pandemia cambia de tendencia al extenderse la variante británica

[Fuente: Por Marta Ricart y Josep Corbella, La Vanguardia, Barcelona, 18feb21]

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