Equipo Nizkor - La trama del 3 por ciento del PDECat era del 8 por ciento en Lérida.

La corrupción del 3 por ciento amarrada a los partidos de la órbita de Convergència ha ido creciendo hasta llegar al 8 por ciento, como se ha puesto al descubierto en la última operación. Los Mossos d’Esquadra tienen indicios de sobornos a los políticos implicados que alcanzan esa cifra, en concreto en una concesión de los servicios de mantenimiento y conservación de seis depuradoras, una operación de 15 millones de euros licitada a 25 años. En las intervenciones telefónicas varios de los investigados hablan de este «pelotazo».

El presidente de la Diputación de Lérida, Joan Reñé, está considerado el cabecilla de la trama corrupta que afecta a la antigua Convergència Democrática de Cataluña (CDC) y que entronca directamente con la original del 3 por ciento, instalada en el partido desde la época del Palau, como mínimo. Reñé -poco considerado en el partido- había estrechado lazos con Quim Torra para medrar al calor del independentismo e, incluso, se jactaba de haber visitado a Carles Puigdemont en Bruselas.

Los Mossos han identificado ya la mayoría de empresas que pagaban a cambio de obras y concesiones en la provincia -buena parte de los 24 detenidos y la veintena de imputados son empresarios-, muchas de ellas las mismas que las de la trama original; pero además sospechan que algunas licitaciones ni siquiera se llevaron a cabo en Lérida, sino que las decidieron directamente desde la «central de mando», es decir, desde la sede de CDC primero, PDECat, después en Barcelona.

Aunque ninguno de los detenidos quiso declarar, algunos sí que mantuvieron conversaciones con los investigadores. Gracias a esas charlas los Mossos confirmaron sus sospechas.

Tras los registros que se produjeron el año pasado en la sede de MyJ Gruas y otros requerimientos, que llevaron a cabo los responsables de la trama habían empezado a enfrentarse entre ellos y a discrepar en cuanto a la forma de seguir adelante. La cohesión alentada por las suculentas mordidas parece que ha empezado a resquebrajarse. Y es el segundo paso, porque ya antes durante los meses de pesquisas, los agentes se percataron de que algunos políticos estaban «sisando» al partido para llenar más su caja personal.

«Los empresarios seguían pagando las mismas mordidas, pero la cantidad que llegaba al partido era menor (aunque en teoría eso ellos no lo sabían) y la que se quedaba en casa aumentaba», explican a ABC de forma gráfica fuentes de la investigación.

Los hábitos iban cambiando. Otro de los aspectos que con el tiempo ha variado es la forma de cobro de las mordidas, dejando cada vez menos rastro: «Pensamos que cobraban en especie, directamente en sobres para no dejar ningún tipo de rastro». Sobre cómo era el reparto de dinero entre los principales detenidos, las fuentes consultadas no especifican aunque sí explican que había algunos más beneficiados que otros. Por ejemplo, Enrique Regaño, jefe de vías y servicios de la Diputación, participaba supuestamente en las adjudicaciones por las mañanas y por las tardes su empresa de ingeniería era requerida o agraciada por parte de aquellos que habían recibido la concesión.

Una muestra insólita de la impunidad de la trama leridana del 3 por ciento es que una de las UTE había puesto un pequeño despacho-almacén en sus instalaciones a un funcionario de la Generalitat, un jefe de servicio territorial que les llevaba «sus temas» sobre el terreno. «Es la corrupción de la corrupción. El top porque eliminaban cualquier tipo de concurrencia pública y la adjucación iba a parar al proyecto más caro, con lo que los ciudadanos han estado pagando ese sobreprecio de forma directa».

04oct18

La trama del 3 por ciento del PDECat era del 8 por ciento en Lérida

[Fuente: Por Cruz Morcillo, Pablo Muñoz y Álex Gubern, ABC, Madrid, 04oct18]

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