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25sep17
El Mayor de los Mossos planta al coordinador de la Guardia Civil del 1-O y manda a su número dos
El Mayor de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluís Trapero, se ha ausentado de la primera reunión de coordinación de los cuerpos de seguridad del 1-O. En su lugar, ha ido el número tres del cuerpo y su mano derecha, el comisario Ferran López. La ausencia de Trapero, que hasta ahora sí ha respondido personalmente a las convocatorias de la Fiscalía, expresa el malestar que existe en el departamento de Interior de la Generalitat y en la propia policía autonómica por haberles sometido al control de la Guardia Civil y del Ministerio.
La decisión de la Fiscalía de dejar en manos de la Guardia Civil la coordinación del dispositivo policial para evitar el 1 de octubre ha indignado al Departamento de Interior de la Generalitat, que ha anunciado que recurrirá la orden del ministerio público y ha encargado un informe jurídico sobre la legalidad de la misma. Ese informe sería entregado este martes por Trapero -si es que esta vez decide ir personalmente- en una nueva reunión de coordinación que se celebrará en la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.
Quienes sí están este lunes en la Delegación del Gobierno, además del comisario López, son los máximos responsables de los demás cuerpos policiales: el jefe de la Guardia Civil en Cataluña, Ángel Gozalo; el jefe de la Policía Nacional en la misma Comunidad, Sebastián Trapote; y el jefe de la Guardia Urbana de Barcelona, Evelio Vázquez. Trapero había acudido hasta ahora a todas las reuniones que se han mantenido a instancias del fiscal Superior de Cataluña, José María Romero de Tejada. Pero, este lunes, quería escenificar su no aceptación de una tutela que nada más anunciarse, el pasado sábado, rechazó de forma tajante. Su protesta, no obstante, ha quedado reducida a un simple gesto, como lo demuestra el que haya enviado a su mano derecha para evitar consecuencias indeseables de tipo disciplinario.
De hecho, el fiscal general del Estado, José Manuel Maza, ha hecho unas declaraciones este lunes en las que, ante la posibilidad de que el Mayor de los Mossos opusiera resistencia a la instrucción de la Fiscalía, ha dicho: ante la posibilidad de que el major de los Mossos ponga resistencia le ha advertido: "Trapero verá, (…) si no quiere cumplir tendrá las consecuencias legales oportunas".
En todo caso, Maza no ha querido adelantarse y ha augurado que Trapero "será razonable y colaborará", después de explicar el hecho de que el cuerpo policial catalán haya sido puesto a las órdenes del Ministerio de Interior como una medida para que el 1-O haya "un plan (coordinado) para que no se incurra en problemas que no queremos que se produzcan". Ese día, "hay tres fuerzas que deben intervenir" y "los Mossos no tienen medios suficientes" y por eso "participan también la Guardia Civil y la Policía", ha dicho y ha asegurado que "no hay desproporción (en la actuación judicial del Estado y del Gobierno), al revés, nos esforzamos por no ir más allá de la ley".
En la reunión de este lunes, Ferrán López ha sido sido el último en llegar y el primero en irse, apenas una hora después de que se iniciara el encuentro. Su petición a la Fiscalía ha sido que inste a convocar la Comisión de Coordinación Policial de Cataluña, un comité de coordinación permanente entre los cuerpos de seguridad del Estado y la Generalitat que depende de la Junta de Seguridad de Cataluña, presidida por Carles Puigdemont.
Malestar del Govern y desconcierto de los Mossos
No cabe duda de que en Cataluña existe un gran malestar por entregar la coordinación de la seguridad para el referéndum al director de Gabinete de Coordinación y Estudios de la Secretaría de Estado de Seguridad, Diego Pérez de los Cobos. El conseller de Interior, Joaquim Forn, dijo el sábado que el jefe de los Mossos "no puede aceptar que bajo el paraguas de la coordinación se pretenda dirigir el cuerpo" a través de un mando del Ministerio del Interior. Por su parte, el portavoz del Govern, Jordi Turull, ha señalado este lunes que el "mando máximo, la coordinación máxima de los Mossos d'Esquadra es de la Generalitat", por lo que el Govern tiene "toda la confianza" en el mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, que es el mando que dará las instrucciones a la policía catalana.
En todo caso, una nota interna de la Jefatura de los Mossos d'Esquadra informó el domingo a los agentes del Cuerpo de la instrucción dada por la Fiscalía de Cataluña de que será un alto cargo de la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio "el encargado de coordinar los dispositivos" para impedir el referéndum ilegal del 1-O. Y en el seno de la policía autonómica ya se han producido reacciones que, salvo alguna excepción, van todas en la dirección de acatar las órdenes, en este caso las del fiscal. El propio Trapero lo señaló en su comunicado al cuerpo autonómico que acataba esas órdenes pese a no compartir que una parte de la actividad de los Mossos sea ordenada y tutelada por un órgano político que depende del ministerio del Interior. De ahí que haya encargado el informe sobre la legalidad de la instrucción.
El portavoz del Sindicato de la Policía Catalana, David Miquel, ha reiterado la disposición de los Mossos a cumplir las órdenes que reciban aunque también ha lamentado que existe cierto desconcierto ante la reiteración de mensajes procedentes de las autoridades soberanistas que les incitan a la insumisión. "Nosotros ya no sabemos a quién creernos", ha llegado a decir en declaraciones a La Sexta. A la policía autonómica le parece que el órgano competente para organizar la seguridad ante un acontecimiento como el del próximo domingo y al que habría que haber convocado es esa Comisión de Coordinación Policial de Cataluña que ha reclamado el comisario López.
Por su parte, la Asociación Profesional de Mandos de la Policía de Cataluña (Copcat, por sus siglas en catalán) ha rechazado la imposición de coordinación de los Mossos desde el Ministerio del Interior por ser "inadecuada y crear un precedente peligroso y no merecido". Pero lo ha hecho en el contexto de la defensa de su profesionalidad, más que como el cuestionamiento de una medida política. "Esta decisión puede afectar nuestra trayectoria de superación profesional y convertirse en un elemento desmotivador para la organización", afirma en un comunicado e insta a los aparatos del Estado a que les dejen hacer su trabajo sin interferencias. También da su apoyo a Trapero por las decisiones adoptadas y recuerda que los Mossos siempre han actuado con imparcialidad y han mostrado lealtad institucional hacia las autoridades judiciales, fiscales y de otros cuerpos de seguridad.
Coincidienco con todo este debate, el fiscal superior de Cataluña ha dado instrucciones al mayor de los Mossos d'Esquadra para que sus agentes identifiquen a los responsables de los centros designados como colegios electorales para el referéndum del 1-O. En una instrucción, Romero de Tejada ordena a Trapero que los Mossos se personen en los centros educativos o administrativos que harían las funciones de colegio electoral en la consulta del 1 de octubre, suspendida por el Constitucional, para identificar a sus responsables y tomarles declaración como testigos.
Los Mossos les pedirán, según estas instrucciones, que entreguen la documentación que tengan sobre estos hechos (comunicación de su designación como colegio electoral, instrucciones de actuación, personas de contacto para incidencias, petición de que entregue las llaves, etcétera) y, en caso de tener algún material electoral, que lo requisen.
[Fuente: Por Pilar Gassent, República de las ideas, Madrid, 25sep17]
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