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03dic10
Ejército español dirige el tráfico aéreo por "huelga" de controladores
El ejército del Aire ha tomado el control del tráfico aéreo en España tras las inesperadas "bajas masivas" de los controladores de los aeropuertos del país, que se han declarado incapaces de trabajar, obligando este viernes a cerrar el espacio aéreo español.
Ante la actitud de los controladores, "el presidente del gobierno (José Luis Rodríguez Zapatero) ha dispuesto que el ministerio de Defensa pase a ejercer la dirección del control de la circulación aérea general en todo el territorio nacional", dijo el número dos del ejecutivo, Alfredo Pérez Rubalcaba, en una comparecencia ante los periodistas en la que no admitió preguntas.
El control militar se mantendrá "hasta que existan garantías de que se recupera por parte de los controladores civiles la normalidad en la prestación de sus servicios", añadió el número dos del gobierno español.
"El jefe del Estado Mayor del Ejército (del Aire, José Jiménez Ruiz) adoptará todas las decisiones que procedan para la organización, planificación, supervisión y control de los controladores de tránsito aéreo al servicio de la entidad pública AENA (gestor de los aeropuertos españoles, ndlr), dijo Rubalcaba.
La decisión del gobierno español llega después de que el 90% del turno de tarde de los controladores españoles presentaran "bajas masivas", declarándose "incapaces para prestar el servicio", y abandonaran su trabajo desde la 17h00 locales (16h00 GMT), según AENA.
Este abandono de sus puestos de trabajo ha ido obligando a las autoridades españolas a cerrar progresivamente sectores de su espacio aéreo, empezando por Madrid, hasta su completa clausura, excepto en la región de Andalucía, "para garantizar la seguridad", afirmó el presidente de AENA, Juan Ignacio Lema.
El ejército del Aire exigirá a los controladores que se incorporen a sus puestos de trabajo, ya que en caso contrario podrían ser acusados de un delito de sedición, penado hasta con ocho años de cárcel.
Algunos controladores del turno de noche empezaron a regresar a sus puestos de trabajo en distintos aeropuertos españoles, pero ello no ha impedido la militarización del espacio aéreo.
En Barcelona (noreste) se incorporaron todos los controladores, mientras que en el aeródromo de Torrejón de Ardoz, donde se encuentra el centro de control de tráfico áereo en la zona de Madrid, se han presentado los controladores pero se han negado a firmar de la hoja de servicio, por lo que no están trabajando.
Esta negativa está repercutiendo en el aeropuerto de Madrid-Barajas, donde se han presentado cinco controladores pero no pueden trabajar debido a las perturbaciones en el centro de control, de donde dependen los vuelos en aproximación a Madrid, según AENA.
En Sevilla (sur) se han incorporado siete de los 11 controladores, añadió AENA.
"No vamos a permitir este chantaje que está utilizando como rehenes a los ciudadanos", había dicho pocas horas antes el ministro de Fomento (Transporte y Obras Públicas), José Blanco.
La iniciativa de los controladores ha provocado el caos entre miles de pasajeros en los aeropuertos al inicio de un largo puente festivo que dura hasta el próximo miércoles, en el que se preveían miles de desplazamientos.
"Esto es denigrante, vivimos en un país tercermundista, tenemos unos controladores incompetentes y un gobierno incompetente", dijo a la AFP Laura Torres, una abogada de 37 años, una de las 250.000 personas afectadas este viernes por la huelga que se quedó bloqueada en el aeropuerto de Madrid cuando iba a ir con su marido a la isla de Lanzarote, en el archipiélago canario.
La empresa de ferrrocarriles Renfe ha reforzado sus servicios hacia distintos puntos de la geografía española para tratar de servir de alternativa.
La huelga de los controladores españoles tiene lugar el mismo día en que el ejecutivo español aprobó en la mañana de este viernes la privatización parcial de la gestión de los aeropuertos españoles y ratificó los horarios de los controladores.
"Venimos denunciando desde hace meses que la gente está llegando a su máximo de horas anuales, que esto se iba a producir en el mes de diciembre", afirmó el portavoz del sindicato de los controladores USCA, Daniel Zamit.
"Nosotros no hemos tomado la decisión de paralizar el espacio aéreo; otra cosa es que a la gente se le haya ido la cabeza. La gente está desquiciada, llevan nueve meses mal y en este momento es un colectivo ingobernable", añadió Zamit en declaraciones a la radio privada Cadena Ser.
[Fuente: Radio Suiza Internacional, AFP, 03dic10]
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