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02mar12
Merkel discrepa de Rajoy: 'No tiene sentido flexibilizar el objetivo de déficit'
El anuncio de Mariano Rajoy de que reducirá el déficit al 5,8% este año frente al 4,4% pactado con la Comisión Europea choca con la postura de la canciller alemana, Angela Merkel, quien ha dicho que "no tiene sentido flexibilizar el objetivo de déficit" y que la zona euro tiene que cumplir con el Pacto Fiscal que ha sido firmado este viernes.
Por su parte, el presidente francés, Nicolas Sarkozy, ha reconocido que Rajoy les ha dado garantías suficientes de que seguirá con el ajuste fiscal y ha reconocido que para algunos países esta labor es "más difícil que para otros".
"En España hay un 23% o 24% de parados y el déficit está en el 8% mientras que habían previsto un 6%. Está claro que esto plantea problemas, pero el Gobierno español ha indicado muy claramente que llevará a cabo una política de reducción de déficit", ha dicho en rueda de prensa al término de la cumbre.
"Estoy convencido de que no hay otra solución para nosotros que reducir el déficit y reembolsar la deuda, pero la solución no puede ser únicamente la disciplina presupuestaria, sino que hay que retornar también al crecimiento".
La UE suaviza las conclusiones
El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, ha recordado al término del Consejo Europeo que los países que no cumplan los objetivos marcados "serán castigados por el mercado" y ha rechazado comparar la situación de España con la de Holanda, que acaba de aflorar un déficit más alto del previsto, porque "las cifras de desempleo y las proyecciones económicas son muy diferentes".
Junto a su homólogo en la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, ha destacado el importante paso que han dado la mayoría de países comunitarios al firmar este viernes el Pacto Fiscal, que "tendrá un impacto en la confianza de los inversores y también de los europeos".
El acuerdo debe ser ahora ratificado por los 25 países firmantes, bien por la vía parlamentaria o a través de un referéndum, como hará Irlanda. Los dos líderes europeos esperan que este acuerdo intergubernamental "pueda ser incorporado lo antes posible en la normativa comunitaria" para lo que sería necesario que se sumaran los dos países que de momento se han autoexcluido: Reino Unido y república Checa.
La declaración final de los Veintisiete hace un llamamiento a los estados miembros a seguir con las políticas de consolidación fiscal y señala que "los países bajo el escrutinio del mercado deberían cumplir con los límites acordados" al tiempo que anima a tomar "más medidas si fuera necesario".
De este modo, los jefes de Estado y de Gobierno de los Veintisiete han suavizado las conclusiones de la cumbre europea para dar cierto margen de maniobra a España y otros estados miembros con fuertes desafíos para este año.
En la anterior versión de la declaración final se les hacía un mandato más estricto. Este sutil pero importante cambio en la redacción no se ha modificado para los países bajo un programa de asistencia financiera, a quienes se les obliga estrictamente a cumplir con los objetivos de sus programas.
En el primer borrador, los dos grupos de países (quienes han sido rescatados y los que están presionados por el mercados) aparecían en la misma frase de las conclusiones y no se hacía ninguna diferencia en su mandato. A ambos se les exigía a "ceñirse a los objetivos acordados".
Países como España e Italia han reclamado en las negociaciones con el resto de países que la UE lance un mensaje algo más flexible en el que se priorice la consolidación fiscal pero sin que ello suponga una asfixia para su economía. El hecho de que los líderes europeos hayan accedido a incluir esta ligera modificación es más importante por lo que supone implícitamente que por la semántica en sí misma.
Anoche el presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, aseguró que en la reunión no se había hablado sobre el déficit de España. Sí hubo una discusión sobre este asunto en el Eurogrupo previo, donde el ministro de Economía, Luis de Guindos, explicó a sus colegas los detalles del desvío del déficit en 2011 y "lo que serán las directrices generales" para este año".
El Gobierno ha ofrecido a los mandatarios europeos hacer fuertes reformas estructurales, como una ambiciosa reducción del sector público, para lograr a cambio cierta relajación en el objetivo de déficit de este año, que en todo caso no se negociará hasta mayo o junio.
[Fuente: Por Carlos Segovia y Javier G. Gallego, El Mundo, Madrid, 02mar12]
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