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18jun09
El Gobierno ultima el fondo de rescate de la banca sin mandar aún el borrador al PP
El consenso prometido por el Gobierno para aprobar el Fondo de Reestructuración y Ordenación Bancaria (FROB) no se ve por ninguna parte. El Partido Popular no ha recibido todavía ninguno de los múltiples borradores del fondo de rescate que circulan por el sector, según confirman fuentes conocedoras de la situación. Y dado que la fecha tope para su aprobación es el 26 de junio, como adelantó El Confidencial, no queda prácticamente tiempo para alcanzar un acuerdo entre los dos grandes partidos.
"En el PP se temen que les van a pasar el decreto prácticamente al mismo tiempo que sale en el BOE", aseguran las fuentes consultadas. "Y les parece intolerable que el Gobierno no trate de alcanzar un consenso en un tema tan crucial para el sistema financiero y para la crisis económica, y que además implica 90.000 millones de euros de recursos públicos", añaden.
El Ejecutivo ha reiterado en varias ocasiones que pretendía consensuar el FROB dada su relevancia. Recientemente, un portavoz de Economía achacaba el retraso en su aprobación -prevista inicialmente para después de las elecciones europeas- a las negociaciones con el PP para consensuar la normativa que regirá el fondo, que tendrá forma de Decreto Ley. Es más, añadía que la tramitación parlamentaria de dicho decreto no tenía demasiada importancia al haber sido consensuado previamente.
Estas buenas intenciones quedan en evidencia con la negativa a enviar ningún papel al principal partido de la oposición, pese a que los borradores sí circulan por el sector. Según las fuentes, en el famoso encuentro del 8 de junio entre los portavoces económicos del PSOE, Octavio Granados, y del PP; Cristóbal Montoro, en la sede del Consejo Económico y Social -y posteriormente en un bar de la zona- no se habló del FROB.
Primero preferentes; después, cuotas
En todo caso, continúan conociéndose detalles de cómo va a actuar el fondo. Así, la entrada del Estado en el capital de las cajas mediante cuotas participativas con derechos políticos, anunciada el lunes por la vicepresidenta Elena Salgado, no será la primera opción salvo en casos de emergencia. En efecto, en los casos de fusiones pactadas entre cajas, el Banco de España hará efectivas las ayudas inicialmente mediante participaciones preferentes "a precios de mercado", según fuentes del sector. Falta por saber si ese precio será el de mercado de verdad o el que están cobrando bancos y cajas a sus clientes por las preferentes que están emitiendo masivamente.
Las preferentes cuentan como recursos propios de las entidades dentro del concepto conocido como Tier 1, y Miguel Ángel Fernández Ordóñez está dispuesto a elevar el tope de estos instrumentos en el capital desde el 30% actual hasta el 40%. Estas inyecciones de dinero público estarán sujetas a un plan de negocio de las entidades fusionadas, y servirán para financiar los costes de reestructuración -cierre de sucursales, despidos, eliminación de duplicidades, unificación de sistemas, etc.- y para sanear los balances mediante provisiones de los activos tóxicos de las entidades -créditos morosos y activos inmobiliarios, principalmente-.
Inyecciones sujetas a condiciones
Ahora bien, estas inyecciones no serán permanentes, sino que tendrán que devolverse al cabo de un plazo aún no fijado. Y estarán condicionadas al cumplimiento del plan de negocio: "Serán como una refinanciación; si no se cumplen las condiciones fijadas, el Banco de España podrá ejecutar las garantías y controlar la entidad", según una de las fuentes consultadas. En ese caso, el supervisor canjearía las preferentes por cuotas participativas con derechos políticos y pasaría a controlar la entidad.
En los casos en que el plan de negocio no convenza a MAFO o cuando no sea posible fusionar a una caja con problemas, la inyección de capital se hará directamente mediante cuotas. Y si se trata de una entidad directamente insolvente, se procederá a su intervención, que ahora será más sencilla y flexible con el instrumento del FROB.
Salgado dio el lunes también la clave de cómo se van a crear las cuotas con derechos políticos: con una suspensión temporal de la Ley de Cajas (LORCA), suspensión que también dará un poder absoluto al Banco de España para acometer fusiones interregionales aunque se opongan los parlamentos de las comunidades autónomas afectadas. "Ésa es la piedra angular de todo el plan: si se permite que las autonomías sigan controlando las cajas y decidiendo las fusiones por criterios políticos, el FROB no servirá para nada", opinan en otra entidad.
[Fuente: Cotizalia, Madrid, 18jun09]
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