EQUIPO NIZKOR |
|
24ene11
La Caixa ultima un nuevo plan estratégico con salida a bolsa y compras de bancos en el exterior
La Caixa presentará este viernes su nuevo plan estratégico para los próximos cuatro años que sustituirá al anterior, que ha abarcado el periodo 2007-2010. Los dos principales objetivos de la nueva guía de la entidad con sede en Barcelona serán la desmutualizacion de la caja, que será a través de una salida a bolsa, y la compra de nuevos bancos en el extranjero.
El grupo financiero presidido por Isidro Fainé y dirigido por Juan María Nin hará públicos los resultados de 2010, un ejercicio duro por el incremento de las provisiones -más de 1.500 millones- y porque el 31 de diciembre acabó el plan estratégico lanzado en febrero de 2007. Aquella hoja de ruta se encontró por el camino con la mayor crisis financiera mundial que se recuerda desde la Gran Depresión. Pese a ello, Nin, que llegó con el plan diseñado por su antecesor, lo mantuvo en los aspectos generales: la internacionalización, la creación de Criteria, el lanzamiento de la banca privada y el apoyo a la Obra Social.
En La Caixa consideran que esos objetivos se han cumplido con creces. Respecto al primero, la entidad ha tomado posiciones significativas en Asia, con la compra de cerca de un 15% del Bank of East Asia (BEA); en Europa del Este, con la toma del 10% del austriaco Erste Bank, y en Latinoamérica, con la adquisición del 20% de Inbursa, el grupo financiero de Carlos Slim. En estas operaciones ha invertido cerca de 4.000 millones de euros.
Sobre el holding de participaciones industriales, la entidad consiguió sacarlo a bolsa en octubre de 2007 en pleno derrumbe de los mercados financieros, lo que provocó que los inversores, la mayoría clientes particulares de La Caixa, llegaran a peder casi el 50% del valor de sus acciones. En tercer lugar, la caja se ha convertido en uno de los mayores jugadores en la gestión de altos patrimonios tras hacerse con el negocio de Morgan Stanley en España. Por último, la entidad ha mantenido la aportación a la Obra Social en 500 millones pese al descenso de los beneficios.
Pero los objetivos financieros y de negocio se han quedado muy lejos. La dureza de la crisis ha impiedido a La Caixa multiplicar por dos el resultado recurrente, hasta los 3.000 millones, como anunció (a septiembre era de 1.228 millones). El ROE tampoco se ha podido alcanzar -quería llegar al 20% y está cerca del 10%- y la eficiencia no la ha podido mejorar hasta el 40% (está en el 43%) pese al esfuerzo en reducción de costes. A la caja también le ha sido imposible alcanzar los 12 millones de clientes -tiene unos 10,5-, si bien ha liderado la mayoría de los segmentos bancarios, como los depósitos, los créditos y las tarjetas, por delante de BBVA, Santander y Caja Madrid.
Para los próximos cuatro años, además de continuar con una gestión rigurosa del riesgo, la solvencia -el core capital está en el 8,7%, por encima de lo exigido-y la liquidez, La Caixa se ha propuesto la desmutualización, un proceso histórico que servirá para reforzar su balance y que presumiblemente se llevará a cabo mediante la salida a bolsa de un banco de nueva creación. La entidad naciente agrupará todo el negocio minorista del grupo y será ofrecido a inversores particulares e institucionales. El proceso, ahora en conversaciones con la Generalitat y el Banco de España, se pondrá en marcha en el segundo trimestre de este mismo año, según fuentes financieras.
El segundo gran objetivo es continuar con la internacionalización comenzada en 2007. La caja quiere crecer más en Europa y en Latinoamérica con participaciones significativas que le permitan ser un jugador importante en varios países. La idea es replicar el modelo llevado a cabo en Bank of East Asia, Erste Bank e Inbursa, así como potenciar la apertura de oficinas de representación y operativas en países como Marruecos, Turquía, Emiratos o India. En el plan estratégico no se incluye la compra o fusión con ningún banco o caja española salvo que sea por imposición del Banco de España o del Gobierno para rescatar a alguna institución en problemas.
El tercer hito será la gestión de su cartera industrial, que sufrirá grandes cambios contables tras la entrada en vigor de Basilea III. La Caixa está analizando el impacto que tendrá en sus cuentas la nueva normativa, la cual le obligará a mayores provisiones. Por ello, tendrá que tomar decisiones relevantes sobre su futuro en Repsol, Gas Natural y Abertis.
[Fuente: Por Agustín Marco, El Confidencial, 24ene11]
This document has been published on 26Jan11 by the Equipo Nizkor and Derechos Human Rights. In accordance with Title 17 U.S.C. Section 107, this material is distributed without profit to those who have expressed a prior interest in receiving the included information for research and educational purposes. |