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25jun09
Soros: "Los CDS tienen licencia para matar"
George Soros, patriarca de los fondos hedge y filántropo, famoso por haber logrado una parte importante de su fortuna apostando en 1992 contra la libra hasta obligar al Banco de Inglaterra a devaluarla, declaró recientemente que los Credit Default Swap (CDS) no tendrían que estar permitidos.
En línea con la famosa frase de Warren Buffett acusando a los derivados de ser "instrumentos financieros de destrucción masiva", Soros calificó a los CDS como "instrumentos de destrucción que deberían ser prohibidos". Estos activos han sido atacados frecuentemente por ser para muchos los principales causantes de la quiebra de Lehman y Bear Stears y de obligar al Gobierno norteamericano a hacerse cargo de la aseguradora AIG.
En principio, con los CDS se obtiene un seguro ante el riesgo de quiebra de un bono. Por el pago de una prima, el tenedor del derivado lograría de su contrapartida (una entidad financiera) en caso de quiebra, la diferencia entre el valor nominal del bono y su precio de mercado. En la práctica, los CDS son proclives a todo tipo de abusos ya que el poseedor del derivado puede salir más beneficiado por la bancarrota de una compañía que por su eventual recuperación, algo que hemos podido comprobar en la reciente quiebra de General Motors. Las palabras de Soros sonaban como una película de James Bond: "Es como poseer un seguro de vida sobre la existencia de alguien y tener licencia para matar".
Soros no está solo. Últimamente son cada vez más los que abogan por su aniquilación. John Dizard comentaba en el FT que los CDS "no son instrumentos de cobertura útiles ya que no hay relación predecible entre estos y el activo subyacente", criticando la propuesta creación de una cámara de compensación para negociar estos instrumentos, ya que al contrario de lo que ocurre con los futuros, la entidad propuesta "no está capitalizada adecuadamente por lo que se corre el riesgo de que cualquier desaguisado terminen una vez más pagándolo los contribuyentes". Jeffrey Immelt, el consejero delegado de General Electric también los ha criticado calificándolos como el instrumento "más fácil de manipular y más ampliamente manipulado que existe".
Habrá que ver si después de que pase la tormenta actual estas voces críticas siguen teniendo tanto eco como en la actualidad. La memoria es especialmente frágil en el mundo de las finanzas, sobre todo si está en juego perder una fuente de beneficios. Por el momento, el borrador presentado por Obama la semana pasada no da alas para que triunfen las tesis de Soros. El status quo se mantiene.
[Fuente: Cotizalia, Madrid, 25jun09]
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