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24dic13
Repsol provisionará YPF en 2014 con un impacto negativo de cerca de 2.300 millones
La petrolera Repsol optará por provisionar el impacto de la expropiación de su filial YPF en Argentina el próximo año y no en el ejercicio de 2013, según han confirmado fuentes del sector energético. Esto será así siempre que sea en ese período cuando se confirme el principio de acuerdo alcanzado entre la compañía española y el gobierno de Cristina Fernández Kirchner.
Así, la provisión, que afectará de manera negativa a los resultados de la petrolera, no se producirá al cierre de este diciembre para alivio de la empresa española y sus accionistas.
Hasta ahora, Repsol ha optado por aplazar la provisión por el impacto negativo que supuso la expropiación del 51% de YPF en el año 2012. El argumento que alegaba la empresa que preside Antoni Brufau es que no se debía dar una cifra que debilitase su posición negociadora en este conflicto internacional.
Pero el pasado mes de noviembre se alcanzó un principio de acuerdo con el Gobierno argentino, por el cual se acordó pagar 3.700 millones de euros, pero en bonos del Tesoro del país andino. Por ello, Repsol está negociando una serie de flecos que han de incluir garantías para la empresa española.
Fuentes de Repsol han declinado hacer declaraciones y apuntan que todavía es pronto para calibrar la provisión. Pero otras fuentes del sector energético cifran la cantidad en torno a los 2.300 millones.
Se prevé que la provisión se llevará a cabo durante el 2014 porque es en ese ejercicio en el que se espera que se cierren los aspectos pendientes del acuerdo, entre ellos la ratificación del justiprecio por parte del Deutsche Bank. Y será entonces cuando se tendrá que llevar a cabo el apunte contable de la provisión.
Apoyo de Deloitte
La decisión de aplazar la provisión se ha tomado esta semana y ha contado con el apoyo del auditor de la compañía, Deloitte. Esta resolución es clave para poder mantener los beneficios de Repsol en el rimo actual a cierre de este año. Repsol ganó hasta septiembre un total 1.410 millones de euros, según los resultados presentados en el tercer trimestre.
En Repsol esperan mantener el dividendo pese a lo importante de la provisión. La clave reside en que la dotación se debe aplicar sobre los beneficios antes de impuestos, no sobre el resultado neto. El pasado año los beneficios antes de impuestos de Repsol se situaron en 3.546 millones, por lo que una provisión de más de 2.000 millones sería una importante merma pero no afectaría, en principio, a la retribución al accionista.
Repsol estudia fórmulas para llevar a cabo la provisión de manera menos lesiva, reduciendo el impacto fiscal sobre la compañía o jugando con los efectos de la consolidación contable.
[Fuente: Por Marcos Lamelas, El Confidencial, Madrid, 24dic13]
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