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11mar09


Fairfield ignora a sus clientes y les remite al fondo de garantía de depósitos de EEUU


Si los clientes del Santander afectados por el fraude de Madoff protestan por la racanería de su compensación -las famosas preferentes-, los del resto de entidades ni siquiera tienen esa opción porque no les han ofrecido nada. Pero nadie ha llegado tan lejos como Fairfield Greenwich, la gestora más afectada por el fraude de Madoff con 7.500 millones de dólares. No sólo no les da nada, sino que les ha enviado unos formularios para reclamar ante el fondo de garantía de depósitos de EEUU (FDIC), que no cubre este tipo de inversiones.

Es decir, es como si Andrés Piedrahita, el famoso responsable de Fairfield en España, quisiera eludir su responsabilidad como comercializador del producto y por la due diligence que no detectó que Madoff era un fraude descargándola en el FDIC. Pero la realidad es mucho más grave, porque está intentando hacer creer falsamente a sus clientes que pueden recuperar su dinero enviando ese formulario, cuando sabe perfectamente que este organismo no se hace cargo de las pérdidas de los hedge funds

"Es una auténtica tomadura de pelo, se están riendo de nosotros", opina un afectado que ha recibido esta documentación. En ella se les explica que el FDIC garantiza hasta 100.000 dólares depositados en bancos de EEUU. Pero, como ocurre con el FGD español, este fondo sólo responde del dinero depositado en cuentas corrientes y depósitos a plazo, no en productos de inversión como fondos, planes de pensiones o valores. Mucho menos todavía hedge funds cuyo fondo principal -del que cuelgan los de los distintos países- está domiciliado en Cayman.

Estos documentos han sido enviados a los inversores en los fondos de Fairfield registrados en España y que se vendían a través de plataformas como Allfunds, y se desconoce si Piedrahita también los ha enviado a los clientes offshore (domiciliados en paraísos fiscales). Estos últimos eran la inmensa mayoría de los inversores de Fairfield, como prueba el hecho de que sólo haya reconocido unas pérdidas de 65 millones de euros en productos oficiales en España. O más claramente, que no se haya presentado ninguna demanda contra esta firma en nuestro país -en EEUU se han presentado varias- y que ni tan siquiera haya habido reclamaciones ante los supervisores.

Piedrahita, como si tal cosa

Esto se explica porque los clientes del financiero colombiano eran en general VIPs a los que conocía en las famosas fiestas de su casoplón de Puerta de Hierro, cacerías, cruceros y demás actos sociales de las clases más adineradas. Porque el fondo de Madoff se vendía como un producto premium a la élite local, los más ricos entre los ricos, capaces y dispuestos entrar con grandes cantidades (o apalancados) ante las perspectivas de una rentabilidad media anual muy interesante (8-12%) con una volatilidad mínima. Como es sabido, Madoff tenía la mejor relación rentabilidad/riesgo del mercado; tan buena, que era mentira. Llegó un momento en que, si no tenías el dinero con Piedrahita, no eras nadie.

Y no parece que le haya afectado demasiado al colombiano el derrumbe de su castillo de naipes, tal como demuestra el numerito del FDIC. En contra de lo que piensa mucha gente, la oficina de Fairfield en Madrid sigue abierta, y continúa a los mandos Fernando Fernández de Córdova, hijo del Duque de Arión, aunque es cierto que ha despedido a casi toda la plantilla. Piedrahita sigue frecuentando su elevado círculo de amigos y mantiene su residencia en Madrid. Las malas lenguas dicen que no puede ir a EEUU, porque le detendrían inmediatamente, ni a su Colombia natal, porque allí podría ser mucho peor; el grueso del capital con el que construyó su imperio proviene de las familias ricas de Latinoamérica.

[Fuente: Cotizalia, Madrid, 11mar09]

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