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03jul12
Así manipulaban el Libor
El presidente y consejero delegado de Barclays se han convertido en las primeras víctimas de un escándalo de manipulación del Libor, un índice central en la economía global, que amenaza con provocar una nueva sacudida sistémica en el sistema financiero. Agencias de seguridad de una decena de países en Asia, Europa y América del Norte mantienen abierta una investigación que afecta, se cree, a los veinte principales bancos del mundo en EE.UU., Canadá, Reino Unido y Hong-Kong, entre los que figuran JPMorgan Chase, Deutsche Bank, Royal Bank of Scotland, HSBC, UBS, Citigroup y Barclays.
1. ¿Qué es el Libor?
El London Interbank Offered Rate (Libor) mide el precio que deben pagar los bancos para pedir prestado a las demás entidades en el llamado crédito interbancario. El tipo de interés exigido a cada banco es una medida de la percepción en el sector de su fortaleza o debilidad realtiva. Cada mañana en Londres, empleados de 16 bancos comunican los tipos de interés que les están exigiendo sus rivales a Thomson-Reuters. Por delegación de la Asociación de Banca Británica -responsable del índice desde su creación en los 80-, la agencia genera el índice eliminando los cuatro tipos más elevados y los cuatro más bajos y realizando la media estadística con los ocho restantes. Se establece diariamente para diez monedas diferentes, sobre 15 plazos de vencimiento diferentes para cada una.
La tasa de ofertas interbancarias de Londres sirve para establecer el tipo de interés en contratos equivalentes a más de 260 billones de euros, cinco veces el PIB mundial, y constituye el precio de referencia para hipotecas, préstamos con tarjetas de crédito o préstamos empresariales. Su importancia es menor dentro de la zona euro, donde es el Euribor, creado a imagen y semejanza del Libor, el que determina el precio de las cosas.
2. ¿Cuándo y cómo se produce la manipulación?
Las alarmas saltaron a finales de 2007 en Estados Unidos, cuando las estimaciones del Libor comenzaron a variar de forma sustancial entre el dólar y las demás monedas. Un estudio del Banco de Pagos Internacionales recopiló en 2008 numerosos días en los que los riesgos financieros se disparaban, agitados ya por la incipiente crisis financiera, pero el Libor permanecía estable. En el caso de Barclays, los reguladores de EE.UU. y Reino Unido le acusan de manipular el índice entre 2004 y 2009.
En los años anteriores a la crisis (2005-2008), varios "traders" de las entidades investigadas inflaban el Libor para incrementar sus ganacias en esos préstamos a corto plazo con el exceso de depósitos que generan cada día. A partir de 2007, en el caso de Barclays, comunicaban tipos artificialmente bajos, en un intento de ocultar a sus rivales y a los mercados la debilidad de su posición financiera en los albores del "crash" de 2008.
3. ¿Era una práctica generalizada o se limitaba a unos pocos "trader" gamberros?
La amplitud de la investigación, liderada por el FBI en Estados Unidos y extendida a una veintena de entidades en una decena de países, apunta a un fenómeno relativamente extendido que pone en cuestión el modelo actual de definición del Libor. La multa impuesta por la Autoridad de Servicios Financieros británica a Barclays es la mayor de la Historia de la entidad, una cifra que llega a 363 millones si se suma la multa recibida en EE.UU. El monto, además, ha sido reducido a cambio de la cooperación del banco con la investigación. Se sabe que Citigroup y UBS al menos también están colaborando. Y que varios "traders" en diversas entidades han sido despedidos ya.
El dossier publicado el miércoles pasado recoge una serie de correos electrónicos entre empleados de Barclays y "traders" de otras entidades que solicitan la manipulación del Libor. "Gracias por tu ayuda, hay varios cafés de camino a tu sitio", le dice un empleado de otro banco a un "trader" de Barclays que le confirma que ha procedido a engañar con el índice: "Hecho, para tí, tío grande". En otro correo, otro colega agradecido exclama a un banquero de Barclays: "Tío, te debo una gorda. Pásate un día que abrimos una botella de [champán] Bollinger".
4. ¿Seguían instrucciones de los directivos de los bancos investigados?
Esta cuestión es el núcleo gordiano del escándalo. La investigación a Barclays recoge una conversación sobre el Libor entre el dimitido consejero delegado, Bob Diamond, y el actual director adjunto del Banco de Inglaterra, Paul Tucker (primer candidato a suceder a Mervyng King en el "trono" del banco central británico). Según la Autoridad Financiera, "cuando el contenido de esta conversación bajó por la cadena de mando, se produjo un malentendido por el cual los empleados de Barclays encargados de comunicar los tipos de interés creían erróneamente que operaban bajo instrucciones del Banco de Inglaterra". El contenido preciso de esa conversación será determinante para la establecer viabilidad o no de los posibles cargos criminales contra "traders" e, incluso, contra directivos, que, según anunció el lunes, estudia la Oficina Antifraude.
Un "trader" anónimo de un banco no identificado explica en un relato trepidante que recogía "The Daily Telegraph" una curiosa presentación interna a comienzos de 2008. "Lo que el trader nos estaba diciendo es que había que ocultar que el banco estaba pidiendo préstamos a tipos de interés tan altos, por lo que estábamos enviando precios más bajos al Libor, similares al resto. ¿Cómo podíamos hacer eso? Fácil. La Asociación de Banqueros Británica, que recopila el libor, nos pide comunicaciones pero no las verifica. El trader decía que había una aceptación generalizada de que se rebajaban los precios unos pocos puntos básicos cada día. Según el trader, todo el mundo lo sabía, y todo el mundo lo hacía".
5. ¿Qué consecuencias puede tener el escándalo?
La multa a Barclays, que podría ser solo la punta del iceberg del escándalo, ha provocado ya la dimisión de dos "superbanqueros" y ha generado ya una reacción furibunda en una clase política británica cansada de lidiar con los excesos del sector financier. El lunes, David Cameron ponía en marcha una investigación parlamentaria para encontrar "toda la verdad cuanto antes" sobre la manipulación del Libor. Diputados y miembros de la Cámara de los Lores "podrán llamar a testificar bajo juramento a funcionarios, ministros y ex ministros y altos cargos, y tendrán pleno acceso a todos los documentos", explicó el "premier". La investigación, que deberá presentar un informe a final de año, servirá de escenario con toda seguridad a un desfile de testimonios de todo el "establishment" político y financiero de los últimos años.
Además, el ministro de Finanzas George Osborne, ha puesto en marcha una investigación específica para estudiar la reforma del Libor, cuya posición en la arquitectura financiera global queda muy dañada. La Oficina Antifraude todavía no ha decidido si presentar cargos criminales por el asunto, aunque numerosos analistas destacan estos días la dificultad de individualizar responsabilidades penales en estos casos de fraude y falsedad en el ámbito financiero, reguladas en Reino Unido por la Ley de Fraude de 2006. En EE.UU., en cambio, sí existen herramientas penales más poderosas para este tipo de criminalidad financiera.
Además de estas graves implicaciones en el ámbito político y legal, el escándalo erosiona aún más la credibilidad de la profesión banquera. Según un sondeo publicado estos días en Reino Unido, los banqueros son la profesión en la que menos confían los ciudadanos: solo el 10% dice confiar en ellos, frente a un 78% que no se fía.
[Fuente: Por Borja Bergareche, Londres, ABC, Madrid, 03jul12]
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