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02ago12
Brasil ordena a la petrolera Chevron suspender sus actividades en el país
Fuera de Brasil en 30 días. Ese es el plazo decretado por el Quinto Juzgado Especializado del Tribunal Regional Federal, con sede en Río, para que la petrolera estadounidense Chevron suspenda sus actividades de extracción y transporte de petróleo dentro del país, según daba a conocer el Ministerio Público Federal, quién se personó en la causa contra la petrolera por el vertido de combustible producido en el yacimiento de Frade, en la cuenca de Campos, en noviembre del año pasado.
El Tribunal no ha dudado en señalar que no cumplir el plazo establecido conllevaría el pago de una multa de hasta 500 millones de reales al día, lo que equivale a unos 250 millones de dólares. No hay que olvidar que Chevron es la segunda petrolera estadounidense más importante que existe, clasificada en 2009 por la revista Fortune como la quinta empresa con mayor caudal monetario del mundo. Por lo que, de no obedecer la resolución judicial, no tendría excusa para abonar la sanción.
Aun así, Chevron, que opera en el país a través de Transocean -la mayor operadora mundial de sondas petroleras responsable de la extracción de Chevron en la zona de Frade y, también, de la petrolera brasileña Petrobas, socia de la petrolera norteamericana en un 30% de su capital-, ha mostrado su desacuerdo, como era de esperar, y ha comunicado por correo electrónico que apelará la decisión.
Pese a que no lo ha confirmado, todo apunta a que la defensa de la petrolera estadounidense basará sus argumentos en lo expuesto por la Agencia Nacional del Petróleo (ANP), regulador de los hidrocarburos en Brasil. Y es que si en un principio Silvio Jablonski, funcionario de alto rango de la ANP, señalaba que el accidente de Chevron fue el responsable del 96 % del petróleo vertido al mar en el país en 2011, aprovechó para anunciar en una audiencia ante el Senado en marzo de este mismo año, que la tragedia en el campo de Frade fue provocado por errores y fallas del proyecto, exculpando a la petrolera de la catástrofe. Ese mismo mes, Chevron precintó y abandonó el pozo siniestrado después de que ocurriera un nuevo vertido de pequeñas dimensiones en el mismo lugar .
Aquella decisión fue aplaudida, entre otros, por el senador Jorge Viana, perteneciente al partido de la presidenta Dilma Rousseff, quien declaró que los cargos contra Chevron «crean un clima de inseguridad» que podría afectar a la muy necesaria inversión en el sector petrolero.
Sin embargo, el Ministerio Público no pareció pensar lo mismo cuando emprendió acciones legales contra la segunda petrolera estadounidense más importante y ahora, con la orden del Tribunal, ve colmada sus pretensiones para que Chevron abandone el país y pague lo estipulado si no acata la decesión.
[Fuente: Por Roberto Resino Pallarés, ABC, Madrid, 02ago12]
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