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07may09


Los bancos de EEUU necesitan 74.600 millones de dólares


El momento clave ha llegado. El Gobierno de Estados Unidos ha aireado las 'vergüenzas' de los bancos americanos, los mismos que han estado en el centro de la diana de una crisis financiera provocada por sus propios excesos. De los 19 bancos que se han sometido a las pruebas de resistencia, diez tienen que llevar a cabo ampliaciones de capital por un total de 74.600 millones de dólares. Además, los reguladores monetarios prevén pérdidas de 600.000 millones para el sector financiero entre 2009 y 2010.

Las filtraciones que se han sucedido en los últimos días sobre de los famosos 'test de estrés' se han ajustado a los resultados conocidos al cierre de Wall Street. Bank of America, Wells Fargo, Morgan Stanley, Citigroup, GMAC, Regional Financial, PNC Bank, Sun Trust, Fith Third y Key Corp necesitan poner en marcha medidas para restablecer su solvencia.

Aunque ayer el secretario del Tesoro, Timothy Geithner, se apresuró a decir que ninguna de las entidades examinadas es insolvente, lo cierto es que, según los pronósticos 10 de las mismas tienen que conseguir liquidez. El martes se remitieron los resultados de las 'pruebas de resistencia' a los interesados y, a partir de ahora, cuentan con un mes para presentar al regulador su plan de acción y seis meses para llevarlo a cabo con éxito.

Bank of America ha cumplido con las previsiones como el peor parado en la evaluación. El banco capitaneado por Kenneth Lewis tiene un agujero de 33.900 millones de dólares. Parece ser que la compra de Merrill Lynch si le ha pasado factura, pese a que se encuentra entre los que más dinero ha recibido del fondo de rescate -45.000 millones de dólares-.

También Citigroup tiene que empezar a hacer los deberes. No obstante, la ampliación de capital que tiene que llevar a cabo dista mucho del anterior, 5.000 millones de dólares según se desprende del informe. Cabe destacar que la cantidad recibida del Gobierno se eleva a los 50.000 millones de dólares.

Morgan Stanley, que consiguió 10.000 millones del fondo de rescate, no ha librado de la quema. Los reguladores consideran que necesita 1.800 millones para restablecer su solvencia. De hecho, antes de publicarse los resultados, el banco ya había anunciado que ampliará capital por 2.000 millones, así como una subasta pública de deuda sin aval del Estado de 3.000 millones de dólares.

Wells Fargo y GMAC son, junto con BoA, las entidades que más liquidez necesitan para salir del bache. Mientras la primera, que ya ha recibido 25.000 millones del TARP (programa de compra de activos tóxicos) necesita 13.700 millones, el agujero de GMAC alcanza los 11.500 millones de dólares. También Wells Fargo ha seguido los pasos de Morgan Stanley y nada más sonar la campana en el parqué neoyorquino ha anunciado la venta de 6.000 millones de dólares en acciones nuevas.

Por el contrario, JPMorgan, Goldman Sachs y Bank of New York Mellon, que entre los tres han recibido 38.000 millones del rescate, han pasado las pruebas y no necesitan capital adicional. En el último mes las tres entidades han logrado colocar deuda sin garantía. Concretamente en el caso de Mellon, el capital obtenido de la subasta llevada a cabo el pasado 5 de mayo servirá para devolver al Tesoro los 3.000 millones de la inyección de capital que recibió el año pasado.

Tampoco necesitarían fondos adicionales BB&T, American Express, Ban Corp, State Street, Metlife (a única excepción con cero dólares del dinero de los contribuyentes en sus cuentas) y Capital One Finalcial Corp, de las entidades que menos han metido la mano en el saco del Gobierno. En ninguno de los casos el dinero recibido ha superado los 4.000 millones de dólares.

Con la publicación de las 'pruebas de resistencia' el Gobierno ha buscado, por un lado, la transparencia que se exige de cara a la utilización del dinero de los contribuyentes y, por otro, tranquilizar a los mercados financieros que desde que comenzó la crisis se mueven a golpe de rumor y con el temor de que los bancos tuvieran más muertos en el armario de los que ya han salido a la luz. Conociendo la verdadera situación de las principales entidades del país, se puede empezar de cero la recuperación sin temer un nuevo brote de 'colapsos' como los que se produjeron después de la quiebra de Lehman Brothers el pasado mes de septiembre.

Ahora comienza la etapa de soluciones. En el plazo de un mes los que han aprobado por los pelos tienen que presentar su plan de acción para conseguir reforzar su solvencia. Geithner explicó que los bancos que requieran más fondos podrán convertir acciones preferentes en manos de inversores privados o del gobierno en capital común, o bien, vender activos adicionales.

[Fuente: Cotizalia, Madrid, 07may09]

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