 | Este documento ha sido publicado el 18Ago04 por el Equipo Nizkor y Derechos Human Rights |
EQUIPO NIZKOR |
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08ago04
Los misioneros claretianos de Colombia denuncian el asesinato del dirigente indígena Kankuano.
Reunidos en Bogotá los días 7 y 8 de Agosto de 2004, hombres y mujeres comprometidos con la vida provenientes de de distintos departamentos del país: Atlántico, Sucre, Norte de Santander, Antioquia, Huila, Valle, Cundinamarca y Meta, pertenecientes a las comisiones de Justicia, Paz e Integridad de la Creación de Colombia de los Misioneros Claretianos, queremos manifestar:
1. Nuestra indignación y repudio por el asesinato de Fredy Arias, indígena Kankuano y defensor de derechos humanos, ocurrido el 3 de agosto en Valledupar por estructuras paramilitares. Este hecho acontece en medio de las negociaciones en Santa Fe de Ralito, poniendo de manifiesto las inconsistencias de esta negociación.
2. Nuestra solidaridad con los familiares y las organizaciones sociales de Arauca y la indignación que nos provoca el Asesinato de Hétor Alirio Martínez, Leonel Goyeneche y Jorge Prieto , ejecutado extrajudicialmente por El Ejército Nacional el jueves 5 de Agosto en el caserío Caño Seco, (municipio de Fortul- Arauca). Estas personas gozaban de medidas cautelares de protección dictadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos - CIDH - y se habían desempeñado durante décadas como reconocidos líderes sociales, campesinos y sindicales. Este crimen presentado en confusas circunstancias, pretende enlodar su dignidad y desvertebrar la organización social en esta región.
3. Manifestamos nuestra postura de buscar una salida política humanitaria al actual conflicto armado. Vemos con preocupación los "diálogos" que el gobierno del presidente Alvaro Uribe Velez mantiene con las autodenominadas "Autodefensas Unidas de Colombia" – Paramilitares - ya que sobre esta mesa de negociación están puestos temas como el indulto, el perdón y el olvido, hechos que afectan la dignidad y continúan vulnerando los derechos de las víctimas frente a la verdad, la justicia y la reparación integral. Este tipo de negociaciones atentan contra la legitimidad de un Estado de derecho, mas aún cuando muchos de estos crímenes han sido cometidos bajo la aquiescencia de estructuras del Ejército Nacional; una negociación bajo la premisa de la impunidad no ayudará a construir la paz.
4. El rechazo a la implementación de políticas económicas, el ALCA, el TLC, que empobrecen, llevan a la mendicidad a millones de personas y menoscaban la soberanía nacional destruyendo y entregando nuestros recursos naturales a las empresas multinacionales, hace que nos unamos al Movimiento latinoamericano de lucha contra el ALCA, TLC, PPP
5. Nos unimos a las comunidades desplazadas, campesinas, indígenas, afrodescendientes, pobladores urbanos y demás movimientos sociales que luchan por la reivindicación de sus derechos al manifestar su vocación por la paz con justicia y dignidad. 6. Renovamos nuestro compromiso cristiano en Defensa de la vida y la integridad de la creación, rechazando las políticas militaristas, so pretexto de la lucha contra el terrorismo que viene victimizando y exterminando a centenares de personas cuya causa es la promoción de la paz y la exigibilidad de justicia. 7. Afirmamos nuestro derecho a la distinción como población civil en medio del conflicto armado que se desarrolla en Colombia. Nos negamos ROTUNDAMENTE a participar y/o colaborar en acciones promovidas por los actores armados (políticas de seguridad democrática, red de informantes, soldados campesinos, auxilio o colaboración a cualquier grupo armado).
Nuestro compromiso con el Evangelio de la vida es un imperativo por la construcción de la paz, como fruto de la justicia, reafirmando y exigiendo el respeto a la dignidad humana.
Bogotá 8 de Agosto de 2004
Comisiones de Justicia, Paz e Integridad de la Creación de Colombia de los Misioneros Claretianos
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