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11ene10
Bachelet inaugura Museo de la Memoria en Chile en medio de protestas
La presidenta Michelle Bachelet inauguró el lunes el Museo de la Memoria y Derechos Humanos en Chile, en honor a las víctimas de la dictadura de Augusto Pinochet, en un acto opacado por protestas de activistas pro indígenas que interrumpieron el discurso de la mandataria.
Mientras la gobernante se dirigía a los invitados, dos mujeres subieron a un poste de iluminación, desde donde reclamaron por la libertad de los que llamaron "presos políticos" mapuches que reivindican tierras en el sur del país.
Una de ellas reclamó por la muerte de Matías Catrileo, un indígena mapuche que falleció tras recibir un impacto de bala en un enfrentamiento con la Policía. Los mapuche representan un 6% de la población chilena de 16 millones de habitantes.
Bachelet, que debió interrumpir su discurso por unos minutos, dijo entender el dolor de las manifestantes que fueron desalojadas por la Policía mientras denunciaban que en Chile se violan los derechos humanos.
Antes del incidente, Bachelet destacó la apertura del lugar.
"La inauguración de este museo es una poderosa señal del vigor de un país unido. Unión que se funda en el compromiso compartido de nunca más volver a sufrir una tragedia como la que en este lugar siempre recordaremos", señaló en referencia a la dictadura (1973-1990).
"Esta tragedia sumó desde el primer día la negación y el ocultamiento al dolor del cautiverio o la muerte (...) tragedia que asoló un país en crisis profundamente dividido y confrontado, que no fue capaz de superar sus diferencias en los marcos de la democracia", dijo Bachelet.
El lugar - de unos 9.000 m2 y ubicado en una céntrica zona de Santiago- contiene registros audiovisuales, grabaciones radiales, dibujos y objetos que guardaron prisioneros de las cárceles y campos de reclusión de la dictadura a lo largo de Chile.
"Hemos entregado algunas cosas al museo, pero son poquísimas las cosas que tenemos de mi padre, porque bombardearon la casa y La Moneda, por eso cualquier cosa que se haya entregado tiene un tremendo valor, porque lo perdimos todo", recordó la diputada Isabel Allende, hija de Salvador Allende, derrocado por Augusto Pinochet.
"Siento mucha emoción que después de 36 años se levante esto. Estamos luchando, y no podemos retroceder. Se están abriendo los caminos para que se haga justicia", señaló por su parte a la AFP, Hilda Alfaro, esposa de Marcos de la Vega, una de las 30.000 víctimas, entre muertos, desaparecidos y torturados que dejó la dictadura de Pinochet.
De la Vega fue alcalde de la ciudad de Tocopilla, en el norte del país, y militante del Partido Comunista. Fue detenido y asesinado en los días posteriores al golpe de Estado.
Al inicio de la ceremonia, un grupo de asistentes abucheó al laureado escritor peruano Mario Vargas Llosa, invitado al acto, a quien le reclamaron el público apoyo que brindó al candidato de la derecha opositora, Sebastián Piñera.
"ĦQue se vaya, no debe estar aquí un tipo que apoya a Piñera!", le gritaron al escritor, que promueve una iniciativa similar en Perú.
[Fuente: Univisión, Santiago de Chile, 11ene10]
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