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06jul05
La Corte de Apelaciones desaforó a Pinochet en el caso de los 119.
Por once votos contra diez, la Corte de Apelaciones desaforó al ex gobernante de facto Augusto Pinochet Ugarte, en el marco del caso denominado Operación Colombo, por la desaparición de 15 opositores al regimen que éste encabezara.
En un pleno extraordinario, el tribunal de alzada escuchó durante más de una hora los alegatos de las partes para resolver la situación del ex uniformado.
El abogado defensor Pablo Rodríguez señaló que esta resolución no se basa en sospechas fundadas: "Se trata más bien de un recurso de carácter mediático, destinado, como ha sido tradicional, a perseguir implacablemente al general Pinochet y al régimen que él encabezó".
El jurista recordó también el delicado estado de salud de Pinochet, argumentando que éste no puede comparecer ante un tribunal. "No puede contestar preguntas, no puede construir su defensa, no puede participar dando los antecedentes que serían necesarios para poder defenderlo de las acusacioens que se le imputan; por lo tanto, resulta absurdo que se pueda desaforar a una persona que no ha tenido participación ni conocimiento de todos los hechos y no está en condiciones tampoco de poder ser objeto de un proceso penal", dijo.
Rodríguez se refirió también al tema de los dineros de su defendido. "Estoy sentido con los medios de comunicación" pues aduce que no hay antecedentes de que Pinochet cometiera delitos en el caso Riggs, y aclaró que son delitos tributarios y no contra los intereses del estado. Además, reiteró que "jamás Pinochet ha tenido 17 millones de dólares, lo máximo que alcanzó a tener, de acuerdo con los antecedentes acumulados en los procesos, son 11 a 12 millones de dólares".
Por su parte, Hernán Quezada, uno de los abogados querellantes, se mostró satisfecho con la resolución: "Estamos muy conformes, es una votación estrecha, que en parte se explica porque hubo varias inasistencias a esta reunión de la Corte de Apelaciones, pero lo fundamental es que se ha resuelto que existen sospechas fundadas de la participación de Augusto Pinochet en este crimen y eso es lo concreto y nos deja muy contentos en esta oportunidad".
Esta es la tercera ocasión en que Pinochet pierde su fuero. La primera vez que ocurrió fue en el caso Operación Cóndor, causa que siguió el juez Juan Guzmán. La segunda, en tanto, fue debido a la investigación abierta por las cuentas de Pinochet encontradas en el banco Riggs.
EL BULLADO CASO.
La Operación Colombo, cuya responsabilidad se atribuye a la plana mayor de la Dina, incluyó el desaparecimiento de 119 personas a partir de julio de 1975 y su posterior encubrimiento a través de un plan comunicacional, en momentos en que arreciaban las críticas internacionales hacia la situación de los derechos humanos en nuestro país.
En esa época, el entonces embajador de Chile ante la ONU, Sergio Diez, dijo ante la Asamblea General que muchas de las desapariciones denunciadas eran falsas, explicando que algunas de ellas correspondían a purgas internas del MIR, que otras simplemente no tenían existencia legal o se trataba de personas muertas o exiliadas.
La versión de Diez era reforzada por el régimen militar en Chile, que atribuía las denuncias de exiliados y partidos de izquierda a la "propaganda comunista".
La prensa chilena reprodujo una información publicada por las revistas LEA, en Argentina, y O'Dia, en Brasil, que decían que el paradero de estas 119 personas estaba aclarado. La primera presentaba una lista del destino de 60 desaparecidos, mientras la segunda, el de los otros 59. Los medios nacionales interpretaron esta noticia como la confirmación de la hipótesis que defendía el gobierno.
Más tarde se verificó que estas revistas habían tenido una corta vida: ambas sólo tuvieron un número, el de julio de 1975, y habrían sido creadas especialmente para la ocasión.
[Fuente: La Tercera, Santiago de Chile, 06jul05]
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