EQUIPO NIZKOR |
|
30may06
Procesan a 8 represores del I Cuerpo de Ejército por hechos del centro El Vesubio
Susana Reyes, una de las 400 personas que permanecieron cautivas en el centro clandestino de detención El Vesubio durante la última dictadura militar, nunca se olvidará de un episodio que vivió en ese lugar, al que llegó estando embarazada, el 16 de junio de 1977. Una noche, uno de los represores a cargo de la guardia le trajo un regalo macabro para su bebe: una pequeña capuchita negra, similar a la que le hacían usar a ella todos los días.
Sobre la base de este testimonio y el de otros sobrevivientes de El Vesubio, el juez federal Daniel Rafecas procesó ayer y dispuso el arresto preventivo de tres militares y cinco oficiales del Servicio Penitenciario Federal que actuaron en ese centro clandestino de detención, como responsables de 157 casos de secuestros y torturas.
La resolución, dictada el 23 del actual pero recién conocida ayer, alcanzó al general Héctor Gamen, al teniente coronel Hugo Pascarelli, al mayor Pedro Durán Sáenz y a los agentes penitenciarios Ramón Erlán, Roberto Zeoliti, Diego Chemes, Alberto Neuendorf y José Néstor Maidana. El fallo incluyó, además, embargos de entre 3 y 4 millones de pesos.
Según los relatos de las víctimas, Gamen, Pascarelli y Durán Sáenz cumplían funciones jerárquicas dentro del centro de detención, en tanto que Erlán, Zeoliti, Chemes (el que le llevó la capuchita a Reyes), Neuendorf y Maidana actuaron como guardias y torturadores.
La averiguación sobre los crímenes cometidos en El Vesubio (que funcionó entre abril de 1976 y noviembre de 1978) es parte de la causa en la que se investigan los delitos de lesa humanidad cometidos dentro de la órbita del I Cuerpo de Ejército durante la dictadura. Ese expediente, el 14.216/03, es una de las megacausas reabiertas en 2003 por la Cámara Federal, luego de la anulación legislativa de las leyes de obediencia debida y de punto final.
Otro tramo de la causa, que involucra a cinco militares -entre ellos, Durán Sáenz y Gamen-, fue elevado a juicio oral en septiembre del año pasado.
La otra megacausa es la de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), en la que el juez federal Sergio Torres detuvo la semana pasada a 12 represores.
"Terror y sadismo"
Para el juez Rafecas, quedó probado que en El Vesubio, situado en la localidad bonaerense de La Matanza, "todo secuestrado era sometido a un régimen con tanta carga de terror y sadismo que de por sí era constitutivo del delito de imposición de tormentos".
En su resolución, Rafecas definió El Vesubio como un "campo de concentración", en el que los recluidos "perdieron su condición de ciudadanos, de seres humanos , para convertirse en objetos".
Entre los casos de secuestros y torturas analizados por el magistrado se encuentran el del historietista Héctor Oesterheld (guionista de "El Eternauta") y el del escritor Raimundo Gleyser. Para dictar su resolución, el magistrado también analizó los casos de 18 estudiantes de secundario (muchos de ellos, desaparecidos), en su mayoría, de los colegios Nacional Buenos Aires y Carlos Pellegrini.
En el auto de procesamiento figura también la historia de dos enfermeras del Hospital de Quilmes, secuestradas luego de que avisaron a la familia de una de las detenidas que ésta había dado a luz a una niña.
[Fuente: Por Gabriel Sued, La Nación, Bs As, Arg, 30may06]
This document has been published on 02Jun06 by the Equipo Nizkor and Derechos Human Rights. In accordance with Title 17 U.S.C. Section 107, this material is distributed without profit to those who have expressed a prior interest in receiving the included information for research and educational purposes. |