EQUIPO NIZKOR |
|
19sep07
Hubo incidentes en la marcha por López en Neuquén.
Un oficial del Ejército recibió un fuerte golpe en la cabeza ayer durante la marcha en la que se reclamó la aparición con vida de Julio López. El militar salió de su casa -frente a la sede del Comando de la Sexta Brigada- cuando un grupo de jóvenes pintaba esvásticas en su auto y en el de su vecino, también oficial del Ejército.
El hombre, muy nervioso, intentó agarrar a los autores de las pintadas pero fue interceptado por un muchacho que de un golpe le abrió la frente. Hubo empujones, gritos y amenazas. Algunos manifestantes pintaron el auto del militar de la casa de al lado, desde donde salió una mujer que indignada intentó calmar a su vecino, presa de una crisis nerviosa.
"¿Qué les hice yo? Yo no soy nazi ni asesino ¿Por qué me hacen esto? ¿Qué tengo que ver yo con todo esto?", preguntaba el militar en medio de los manifestantes y al tiempo que las bombas molotov impactaban contra las ventanas del edificio militar.
Los jóvenes que atacaron las viviendas de los militares están ligados a las actividades culturales y fueron calmados por militantes más experimentados. Algunos de ellos reclamaron a los periodistas que no sacaran fotos, que salieran del lugar y advertían que el incidente "no es la noticia, la noticia está allá, vayan para allá", dijo una muchacha señalando el edificio del Ejército.
Dos dirigentes que participaban del reclamo -entre ellos el de ATE Baltasar Alvarez- calmaron al militar, lo acompañaron hasta su casa y lograron alejar a los manifestantes que ya se habían reintegrando a la columna. En pocos minutos el lugar se llenó de militares de civil y enseguida llegó la Policía. En las casas que están frente al Comando viven oficiales del Ejército y es común que en las marchas les pinten esvásticas. Ayer, los aerosoles se descargaron directamente en los autos, un Renault 11 y VW Fox.
El incidente se produjo durante una marcha de la que participaron alrededor de 1.800 personas y que comenzó a las 19 en el monumento a San Martín. Era bueno el clima entre los manifestantes. Es que ayer a la tarde fue encontrado sano y salvo el joven Sergio Daniel López, cuya desaparición había sido denunciada hacía una semana. "Es un gran alivio", dijo el defensor del Pueblo Juan José Dutto quien con su esposa se aprestaba comenzar la caminata pidiendo por el otro López, Julio (ver página 31). Ya sobre el cierre de la marcha las Madres de Plaza de Mayo habían pedido un aplauso por la aparición del joven, quien estaba en Catriel.
Ya en el monumento a la Madre, el referente de la agrupación HIJOS del Alto Valle, Gervasio Díaz, fue el primer orador. En sus manos tenía un discurso que fue previamente acordado con las distintas organizaciones que se sumaron a la manifestación. Díaz recordó cada uno de los casos impunes de la región y pidió por Sergio Avalos, Florencia Penacchi y Otoño Uriarte. También apuntó contra "los asesinos" del maestro Carlos Fuentealba y contra las autoridades políticas y judiciales.
"Sobisch 100% asesino", gritaron los manifestantes quienes llevaron una pancarta con esa leyenda.
"Ahora, a cuatro años de su desaparición, el gobierno sale a ofrecer una recompensa para quien aporte datos de Sergio Avalos ¿Qué carajo hicieron antes?", clamó Lolín Rigoni, de Madres de Plaza de Mayo.
Con todo, la marcha cerró alrededor de las 20. A esa hora ya estaba colocado un cerámico que perpetúa el reclamo de aparición con vida de Julio López.
En Roca, un grupo de manifestantes reclamó la aparición de Julio López. Convocados por diversas entidades, recorrieron las calles céntricas.
[Fuente: Diario Río Negro, Gral Roca, Arg, 19sep07]
This document has been published on 01Oct07 by the Equipo Nizkor and Derechos Human Rights. In accordance with Title 17 U.S.C. Section 107, this material is distributed without profit to those who have expressed a prior interest in receiving the included information for research and educational purposes. |