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27mar08
La Justicia detuvo al tío del asesino confeso del tesorero de Moyano
La causa por el asesinato de quien fuera tesorero de la Federación Nacional de Camioneros y líder del sindicato en Santa Fe, Abel Beroiz, sigue sumando detenidos. Un tío de Raúl Flores, el sicario de 23 años que aceptó ser uno de los autores materiales del hecho, fue apresado ayer por personal de la División Homicidios.
El secreto de sumario impide conocer la imputación que pesa sobre el detenido, identificado como Hugo Bustos, de 34 años, aunque fuentes de la investigación estimaron que tendría una participación secundaria en el episodio que terminó con el crimen de quien fuera uno de los más estrechos colaboradores del líder de la CGT, Hugo Moyano.
Bustos fue demorado en diciembre, cuando la policía realizó allanamientos para apresar a Flores. Sin embargo, tras una declaración informativa, fue liberado.
Las declaraciones de Juancito -el menor que está señalado como coautor del crimen- y de su madre, la mujer de 40 años que quedó imputada por encubrimiento y que recuperó la libertad la semana pasada, habrían vinculado de alguna manera a Bustos con el homicidio.
Esos dos testimonios y algunas otras aristas que fueron apareciendo en la causa inclinaron al juez Osvaldo Barbero a poner la lupa sobre las actividades de este hombre.
"Probablemente conoce lo que sucedió y pudo manejar algo del dinero que se cobró por el trabajo. Esa es una de las presunciones que se manejan", señaló una fuente policial.
Flores declaró ante Barbero que quienes le encargaron el asesinato de Beroiz ofrecieron 80 mil pesos por el trabajo, aunque luego sólo cobró 20 mil. Los investigadores comienzan a dudar sobre ese punto de la declaración de quien admitió ser el autor material del crimen.
Las diferencias entre quienes participaron en el hecho despiertan sospechas acerca del monto que se cobró "sería mayor a los 20 mil declarados" y el destino que se le dio a ese dinero.
En el tribunal quieren saber si Bustos ocultó parte de la plata, encubrió a los homicidas o tuvo relación con la logística del crimen.
En el allanamiento, realizado a media mañana en una humilde vivienda de Presidente Quintana al 200 bis, en la zona sur de Rosario, se secuestraron papeles y dos aparatos celulares.
Los documentos recogidos allí no serían valiosos para la causa, mientras que los teléfonos se utilizarán para ser peritados y establecer posibles comunicaciones con los responsables del ataque.
Bustos fue alojado en la sede de la alcaldía local, el mismo lugar en el que estuvo detenido Flores hasta el sábado pasado y en el que fue ingresado el martes último Julio Jerez, el falso abogado al que se le imputó una eventual participación en el homicidio.
Ayer se conoció que la figura penal que pesa sobre Jerez podría agravarse si Barbero logra comprobar, como estudia por estas horas, que organizó, planificó y contrató a los autores materiales del crimen, a quienes además podría haberles proporcionado las armas y el dinero para cometer el crimen.
Mientras prepara una serie de medidas para avanzar sobre los autores intelectuales del crimen, el juez Barbero podría recibir hoy al abogado de la familia Beroiz, Néstor Pujato, constituido como actor civil en la causa.
Pujato confirmó a Clarín que hoy viajará a Rosario con la intención de proponer nuevas medidas al magistrado. Entre otras, algunas indagatorias.
El abogado confió que la familia del sindicalista asesinado tiene gran expectativa por el resultado que pudiera haber arrojado el entrecruzamiento telefónico, un elemento que desde el martes está en poder del juez que investiga esta causa.
[Fuente: Clarin, Bs As, Arg, 27mar08]
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