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19jul14
El oficial de inteligencia Von Kyaw fue detenido en Panamá con pasaporte falso
Cuando fue detenido en Panamá por las autoridades migratorias el 19 de junio pasado con un pasaporte falso, el ex militar de inteligencia Ricardo Luis Von Kyaw, de 66 años, llevaba cuatro años y medio prófugo, y antes había pasado por Paraguay, Uruguay y Brasil. La pregunta sobre cómo hizo para financiar su huida es la que guía la investigación sobre la red de encubrimiento que le permitió salir del país y sostenerse económicamente, financiando viajes, atenciones médicas por problemas de salud y alojamiento de primer nivel. El control migratorio lo halló en un hotel de la capital panameña.
Un informe de la Unidad de Información Financiera que forma parte de una causa en la que se investiga el financiamiento de presuntos terroristas de Estado, cuya instrucción está a cargo de la Unidad Fiscal de La Plata que interviene en los juicios por crímenes de lesa humanidad, indica que al momento de fugarse Von Kyaw era el gerente de la empresa de Seguridad privada Consultora Videco S.A., director de Argenpolo S.A. e integrante de la Cámara Argentina de Empresas de Seguridad e Investigación (CAESI).
El mismo informe refiere que tuvo acreditaciones anuales en cuentas bancarias a su nombre y en otras en las que figura como titular junto a otras personas por más de 38 millones de pesos en 2008, por casi 41 millones y medio en 2009 y por casi 14 millones en 2010. Von Kyaw se fugó en febrero de ese año.
Atrapado
Ante los funcionarios panameños, Von Kyaw exhibió un pasaporte de ciudadano alemán nacionalizado paraguayo, con el nombre de pila Jürgen. La falsedad de esa documentación derivó en que Panamá decidiera expulsarlo a la Argentina, donde finalmente fue detenido el 30 de junio al pisar el Aeropuerto de Ezeiza. Dos funcionarios panameños, que acompañaron en el vuelo al fugitivo, garantizaron su entrega.
El pasaporte era casi perfecto. Según informaron las autoridades panameñas a sus pares de Argentina, Von Kyaw admitió que lo había "comprado" en Paraguay.
No obstante esa confesión, migraciones de Panamá ordenó realizar el "fichaje" de Von Kyaw. El trámite consistió en enviar sus huellas digitales a Alemania y a Paraguay para constatar los dos orígenes que indicaba el pasaporte. Las huellas también fueron enviadas a Interpol y así surgió que tenía pedido de captura internacional ordenada por el juez Federal de La Plata, Humberto Blanco, en cuatro causas judiciales que tramitan en los Juzgados Federales Nº1 y Nº3 de la capital bonaerense, a cargo hoy del mismo juez.
El ex teniente del Destacamento 101 de Inteligencia del Ejército en La Plata se había fugado en febrero de 2010, tras el dictado de la primera orden de detención en su contra en la causa por los crímenes cometidos en "La Cacha", que involucró a una veintena de militares, personal civil de inteligencia y penitenciarios bonaerenses.
Se sospecha que uno de los militares apresados inicialmente llegó a avisarle por teléfono que lo iban a buscar -el hombre estaba detenido, pero no incomunicado-, dado que todos los buscados estaban individualizados en la orden de detención que la policía exhibió ante cada imputado.
Un error de procedimiento le dio más tiempo: la orden de captura de Von Kyaw consignó el numeral del edificio donde vivía pero no el departamento que ocupaba. Por esa razón, debió librarse una nueva y se perdieron horas que resultaron fundamentales para la huida del ex militar a Paraguay.
Von Kyaw eligió el mismo destino que otros imputados por crímenes de lesa humanidad, como el ex capellán militar bahiense, Aldo Vara, quien falleció el mes pasado cuando se encontraba en proceso de extradición. La investigación sobre el financiamiento del prelado castrense durante los ocho meses en los que permaneció prófugo de la justicia federal de Bahía Blanca tuvo avances que no se han registrado en otras causas y tiene procesados al obispo de esa ciudad, Guillermo José Garlatti, y al empresario Leopoldo Bochile, quienes facilitaron que Vara pudiera percibir un beneficio jubilatorio mientras estuvo fugitivo.
También, se profugaron en Paraguay el apropiador de los mellizos Matías y Gonzalo Reggiardo Tolosa, Samuel Miara, y el apropiador de María Natalia Suárez Nelson Corvalán, Omar Alonso, quienes huyeron al vecino país cuando en los '80 los apremiaban las investigaciones por la identidad de los niños, que finalmente fueron recuperados.
Los casos de Miara y Alonso tienen en común con el de Von Kyaw no sólo el destino elegido para profugarse, sino que aquellos chicos nacieron en 1977 durante el paso por "La Cacha" de sus madres desaparecidas, María Rosa Tolosa y María Elena Corvalán, en el mismo período en el que a Von Kyaw se lo involucra en crímenes de lesa humanidad. Von Kyaw, de hecho, está imputado por su participación en esos casos y en otros que involucran a alrededor de 130 víctimas de crímenes de lesa humanidad sólo en La Cacha.
Pero a Von Kyaw también se lo requería por su presunta participación en los más grandes centros clandestinos de detención de la zona sur del Gran Buenos Aires: los Pozos de Banfield y Quilmes y la Brigada de Investigaciones de San Justo, que en conjunto alcanzaron a unas 500 víctimas judicializadas.
Las imputaciones de la Fiscalía contra el ex militar encuentran su razón en la intervención de Von Kyaw dentro de uno de los órganos que se erigió en la columna vertebral de la represión ilegal de la zona. El ex militar devenido empresario -antes del fin de la dictadura Von Kyaw se retiró con el grado de capitán- se desempeñó entre 1976 y 1978 como teniente primero en la Sección Central de Reunión de Información del Destacamento de Inteligencia 101 del Ejército. Por esa repartición -que dependía del Batallón 601 del mismo ramo- circulaba la información utilizada por las distintas unidades militares de gran parte de la provincia de Buenos Aires para la concreción del plan criminal de exterminio.
Paraguay y la caída de Lugo
En un inicio, la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), que compartió luego la búsqueda con la Policía Federal, logró ubicar a Von Kyaw en Paraguay. También, determinó que salía de ese país a localidades del sur de Brasil para realizarse atenciones frente a un problema de salud y que en varias ocasiones pudo trasladarse por tiempos prolongados a la República de Uruguay a atender negocios.
Desde el Juzgado Federal Nº1 de La Plata, revelaron a Fiscales que en junio de 2012, una semana antes de que cayera el presidente (Fernando) Lugo, las autoridades de Seguridad del vecino país tenían previsto un procedimiento en una finca de Paraguay donde esperaban detenerlo.
Pero la destitución del presidente paraguayo y el deterioro de las relaciones entre los gobiernos de ambos países a raíz de la decisión de los legisladores de la oposición, derivaron en que que el procedimiento no se llevara a cabo y empantanaron el trabajo mancomunado, hasta que asumió el nuevo gobierno democráticamente electo en Paraguay.
La pista sobre el paradero de Von Kyaw se había perdido cuando fue detectado con un pasaporte falso en Panamá. No se sabe por qué el ex militar decidió dejar Paraguay y eligió al país centroamericano como su refugio.
Tanto el fiscal General de La Plata, Hernán Schapiro, como desde el Juzgado Federal N°1 de la capital bonaerense, destacaron la respuesta del gobierno panameño para garantizar la entrega de Von Kyaw a la Argentina.
El ex militar estaba muy lejos pero llegó más rápido que otros que están más cerca. Eso fue posible gracias a que su remisión a nuestro país se produjo por la expulsión a raíz de la violación de las normas migratorias y no mediante un proceso de extradición. En este último caso, podría haber demorado alrededor de dos años, como lo demuestra la experiencia con otros fugitivos.
De hecho, el compañero de armas de Von Kyaw en el Destacamento 101 de Inteligencia platense, el ex capitán y dirigente del club Colón de Santa Fe, Alberto Julio Candioti, está detenido en Uruguay desde mayo del año pasado, mientras cursa el juicio de extradición.
[Fuente: Por Lucas Miguel, Ministerio Público Fiscal, 19jul14]
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