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29mar11
El 40% de los ocupados gana menos que el salario mínimo
La mejora en la distribución del ingreso que se registró en el último tramo de 2010 no alcanzó para modificar un panorama aún complicado para el sector de menores ingresos: por lo menos el 40% de la población ocupada gana menos que el salario mínimo vital y móvil, que hoy se ubica en 1840 pesos por mes.
Los datos surgen de la última encuesta permanente de hogares (EPH) publicada ayer por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), que muestra que casi la mitad de los ingresos totales de la población se lo lleva el 20% más rico.
La buena noticia es que el coeficiente de Gini, según ingreso per cápita familiar, el indicador que mide la desigualdad, registró una nueva baja y se ubicó en 0,439 punto, el más bajo de toda la serie iniciada a mediados de 2003 (siendo 0 la igualdad absoluta y 1 la desigualdad absoluta). Un año atrás, ese indicador estaba en 0,446 punto.
"Hay una mejora, pero lo correcto es mirar la tendencia de largo plazo, y ahí se ve que desde principios de 2009 el indicador se estanca en la franja en torno a 0,45", indicó Jorge Colina, investigador jefe del Instituto para el Desarrollo Social Argentino (Idesa).
Según el especialista, el plan de Asignación Universal por Hijo (AUH) no brindó un impulso destacado a la mejora en la distribución, debido a que, por sus características, no está enfocado en los deciles 1 y 2 (el 20% más pobre de la población), sino que alcanza también a los deciles intermedios.
Al ordenar la población ocupada según la escala de ingresos de la ocupación principal, el informe del Indec muestra que los cuatro primeros deciles ganan menos de $ 1800, por debajo de lo estipulado en la resolución 2/2010 del 5 de agosto pasado como salario mínimo vital y móvil para un mes con 200 horas de trabajo.
"Toda esa gente está por debajo del salario mínimo, se trata fundamentalmente de trabajadores informales", explicó Colina. También se incluyen los jubilados que cobran la mínima y muchos empleados que trabajan media jornada o por horas. De hecho, los dos primeros deciles tienen un promedio de 22 y 33 horas trabajadas por semana, respectivamente.
Otro dato que surge del informe oficial es que el 10% más rico de los hogares argentinos tiene ingresos 16 veces mayores a los del 10% más pobre. Hace un año, la diferencia era de 17 veces.
El análisis de la distribución de ingresos por hogares muestra que el 30% no llega a cubrir el valor de una canasta básica para una familia tipo. Según la medición de la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL) correspondiente a febrero, un hogar compuesto por dos adultos y dos menores necesita $ 2161 para tener sus necesidades básicas satisfechas.
De hecho, los hogares que entre todos sus miembros reciben más de 5000 pesos (por ejemplo, un sueldo de $ 2600, otro de $ 1500 y dos AUH de $ 220) deben considerarse afortunados: están entre el 30% más rico de la población.
Respecto del tercer trimestre de 2010, los tres deciles más ricos sufrieron un recorte en sus ingresos medios de entre 0,5 y 4 por ciento, mientras que los deciles más bajos incrementaron su participación. Esta situación puede estar relacionada con que el medio aguinaldo de mitad de año impacta en la encuesta del tercer trimestre y beneficia a los trabajadores formales, que están entre los deciles medios y altos.
En la comparación con un año atrás, el decil más bajo incrementó en un 30,1% sus ingresos medios. El resto de los deciles aumentaron sus ingresos entre 24,4 y 29,5 por ciento.
Brecha en aumento
En tanto, un estudio privado destacó la recuperación del salario obrero en los últimos años, incluso frente a la inflación. "En estos últimos cuatro años, el salario obrero industrial por hora, que se establece por la negociación colectiva, subió 2,3 veces, a una tasa promedio de 23,1% anual. En el mismo período, los precios minoristas se incrementaron 2,2 veces, a una tasa anual de 20,9%. En otros términos, los salarios pudieron hacer frente a la inflación, con una ganancia en términos reales de poco más de 7%. Sin embargo, debe observarse que hubo pérdidas en diez de los 16 trimestres considerados", destacó SEL Consultores, del economista Ernesto Kritz.
La contracara de esta mejora fue el alejamiento progresivo de los salarios respecto de la productividad del trabajo. "Entre 2007 y 2010, la brecha entre el crecimiento de ambas variables se extendió a 2,3 veces", afirmó el informe.
[Fuente: La Nación, Bs As, 29mar11]
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