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28mar10
La ministra de Defensa rendirá homenaje a los conscriptos desaparecidos en la dictadura
La titilar de la cartera de Defensa, Nilda Garré, encabezará esta tarde, en el Edificio Libertador, un acto de homenaje a los soldados conscriptos desaparecidos durante la represión terrorista de Estado pero que figuraban como "desertores" en los registros de las Fuerzas Armadas.
En la ceremonia que comenzará a las 15 en la Plaza de Armas del Edificio Libertador, sede de la cartera castrense, se descubrirá una placa que recordará a 55 soldados detenidos-desaparecidos mientras cumplían el servicio militar obligatorio entre 1975 y 1983.
El listado surge de un informe elevado a Garré por Ileana Arduino, titular de la Dirección Nacional Nacional de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario del Ministerio de Defensa y ordenado por la resolución 420 de esa cartera en mayo de 2009.
El informe precisó que los 55 casos surgen del cruzamiento de datos del Archivo Nacional de la Memoria (ANM) y registros requeridos a las Fuerzas Armadas.
"Es importante destacar aquí que este número (los 55 casos) no refleja la totalidad de jóvenes que fueron secuestrados mientras cumplían su servicio militar obligatorio y se encuentran aún en calidad de detenidos desaparecidos, sino sólo aquellos que las respectivas fuerzas calificaron como desertores", puntualizó.
En sus considerandos, la resolución 420 recordó que ya el Informe Final de la CONADEP, conocido como el "Nunca más", consignaba que "la respuesta sistemática a familiares que inquirían sobre la suerte de su hijo desaparecido cuando prestaba servicio, fue que éste había desertado".
"Aún en el presente existen muchos casos de detenidos-desaparecidos que, habiendo sido secuestrados durante su servicio militar obligatorio, continúan consignados en los registros de las Fuerzas Armadas como 'desertores'", subrayó.
Concluido el informe, Garré ordenó a cada una de las Fuerzas Armadas "la modificación en los registros de la condición de desertores por la de detenido-desaparecido con el número de legajo de la CONADEP que corresponda".
Este lunes, acompañarán a Garré en la ceremonia otras autoridades del Ministerio de Defensa, de las Fuerzas Armadas y representantes de los organismos de derechos humanos.
Hablarán en el homenaje la ministra de Defensa y la madre de uno de los conscriptos desaparecidos.
El acto se enmarca en las acciones emprendidas por el Gobierno Nacional en repudio al golpe cívico-militar de 1976 y en la política de derechos humanos impulsada en las Fuerzas Armadas por el Ministerio de Defensa, señaló un comunicado de esta cartera.
Casos de desaparición forzada de conscriptos en unidades de las tres Fuerzas Armadas fueron denunciados ya en tiempos de la dictadura y recopilados en uno de los folletos que el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) comenzó a publicar en 1982, sobre el sistema represivo.
"Relatos y testimonios que prueban, sin lugar a dudas, que las 'desapariciones', a partir de 1976, de casi un centenar de jóvenes que cumplían con el servicio militar obligatorio fueron, en realidad, detenciones ordenadas por sus superiores o ejecutadas por agentes de los servicios de inteligencia con aprobación de aquellos", escribieron en ese folleto del CELS Augusto Conte Mac Donell, Noemí Labrune y Emilio Fermín Mignone.
Por su parte, el capitán José Luis D'Andrea Mohr denunció en su libro "El batallón perdido" la detención-desaparición de 129 conscriptos entre 1976 y 1983.
Este oficial fue dado de baja en el Ejército por el dictador Jorge Videla tras el golpe de 1976 bajo la acusación de desobedecer órdenes superiores, reincorporado en 1978 en medio de la tensión militar con Chile y destituido en 1986 por un tribunal castrense que lo acusó de "maniático querellante".
D'Andrea Mohr falleció a comienzos de 2001 pero poco antes le fue restituido el grado a raíz de gestiones iniciadas por el general Martín Balza cuando era jefe del Ejército.
Asociaciones de ex soldados nacidos entre 1953 y 1959 formularon denuncias similares, igual que familiares de los conscriptos desaparecidos.
Entre estas denuncias, la entonces presidenta del CELS, Laura Conte, relató en agosto de 1999 ante la Cámara Federal de La Plata la desaparición de su hijo Augusto Conte Mac Donell mientras cumplía el servicio militar en la Base Aeronaval de Punta Indio, el 7 de julio de 1976.
Por la detención-desaparición en agosto de 1976 de Luis Daniel García y Luis Pablo Steimberg, que hacían la conscripción en el Colegio Militar, fue detenido y procesado en 1984 el último dictador, Reynaldo Bignone, quien fue director del instituto con el grado de coronel cuando se consumaron los secuestros.
En esta causa Bignone logró el sobreseimiento gracias a la Ley de Obediencia Debida pero se halla actualmente imputado junto a otros represores en el segundo juicio por crímenes de lesa humanidad cometidos en Campo de Mayo.
[Fuente: Telam, Bs As, 28mar10]
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