EQUIPO NIZKOR
Información

DERECHOS

23may08


Trabajadores no docentes se oponen a la contratació de seguridad privada para el control de acceso de "indeseables" a la Universidad.


DECLARACION

Ante el conflicto suscitado en la Facultad de Humanidades y Artes de la Universidad Nacional de Rosario en relación con la implementación del servicio de vigilancia privada en dicha casa de Estudios; los trabajadores No Docentes que participamos en el Encuentro de Trabajadores de las Universidades Nacionales – ETUN – queremos expresar:

Nuestro rechazo a la Resolución N 047/08 CD, que habilita la actuación de agentes de Vigilancia privada con el objetivo de que “restrinjan el ingreso a toda persona ajena a ésta y que no tenga que realizar trámites académicos y/ó administrativos…”

En primer término porque seguramente la actuación de la vigilancia privada estará dirigida a impedir el ingreso a los niños pobres que se ganan la vida en la calle circulando, fundamentalmente, por todo el centro de la ciudad.

Nos preguntamos ¿Cuáles serán los métodos para determinar quién viene efectivamente a realizar un trámite ó actividad académica a la Facultad?

A los agentes de vigilancia privada… ¿Les alcanzará una mirada para discernir la peligrosidad de quien entra ó pretenda entrar?

¿Reconocerán los agentes de seguridad privada si alguna vez alguien; vistiendo saco y corbata, maletín en mano ó con algún atuendo por demás de “respetable”, ingresara a vender ó a consumir droga?

¿Le impedirán el ingreso a quienes van bien vestidos y pulcros, aunque tengan “oscuras” ó delictivas intenciones?

Lamentablemente, tenemos la sospecha que sólo quedarán afuera TODOS aquellos niños y adolescentes, cuyas apariencias no concuerden con lo que se considera estéticamente adecuado para frecuentar una casa de Altos Estudios ó con lo que el criterio de la persona que está en la puerta determine en cada ocasión.

La mencionada resolución, aprobada por el Consejo Directivo el 21 de Abril de 2008, desconoce y descarta de plano, el trabajo que viene desarrollando desde el año 2007, la Comisión de Seguridad.

Esta comisión, integrada por toda la comunidad Universitaria interesada en la problemática (autoridades; consejeros directivos; docentes; estudiantes y no docentes) había debatido en profundidad durante extensas reuniones plenarias; y había alcanzado consensos para la implementación de varias medidas tendientes a resolver el problema, siempre desde un abordaje integral y no excluyente de la presencia de los chicos llamados “de la calle”.

Una de ellas era la puesta en marcha de aulas-taller, donde los estudiantes universitarios brindaran actividades de apoyo escolar; de juegos; de contención a quienes más lo necesitan.

Por otra parte, se había resuelto solicitar asesoramiento especializado a Psicólogos y Trabajadores Sociales -ya que la UNR forma a esos profesionales- para encarar de la manera más idónea posible; la delicada tarea de contener a niños de extremada vulnerabilidad.

También se había acordado que -desde las autoridades de la Facultad- se tomara contacto con las Áreas que se ocupen de la Niñez, tanto del Municipio como de la Provincia para coordinar acciones, de manera tal que fueran más efectivas las actividades a desarrollar en la Facultad por los estudiantes voluntarios.

Es decir, HABIA PROPUESTAS DE TRABAJO; había mucho trabajo por hacer, y muchas ganas, sobre todo, de los estudiantes.

Todas ellas, con una visión HUMANISTICA que –se nos ocurre- era coherente con una Facultad de Humanidades.

Por otra parte, no intentaban negar la realidad de exclusión social; ni cerraban las puertas para aislarse de la pobreza.

Al día de hoy, esas medidas todavía no se han ejecutado, motivo por el cual no se ha podido demostrar su eficacia.

Consideramos la presencia y el accionar de agentes de seguridad privada en la Universidad Pública, como altamente preocupante desde varios aspectos.

En primer término, porque las empresas que prestan Servicios de Vigilancia privada; generalmente están fundadas; integradas ó monitoreadas por miembros del Ejército y fuerzas de seguridad; ya sea retirados ó activos.

No hace falta explayarse en la conocida y nefasta trayectoria del actuar represivo y criminal de muchos integrantes de esas Instituciones en contra el pueblo y en particular contra miembros de la Universidad.

Este tipo de medidas, como el contratar a una agencia de seguridad por más de un millón de pesos -que pagaremos todos- no vienen sino a reafirmar un rumbo de “mano dura” ó “tolerancia cero” que parece el elegido por quienes conducen los destinos de nuestra Universidad.

Para muestra, no tenemos más que remitirnos a los hechos sucedidos hace pocos meses, cuando fuimos testigos del accionar represivo de los barras-brava contra los estudiantes en ocasión de la elección de Rector.

En el mismo sentido, es necesario recordar el escándalo generado a fines del 2007 en el ámbito de nuestra Universidad y en la sociedad toda, cuando las autoridades de la UNR, indemnizaron con 30.000 pesos (y le abonaron más de 5000 a su abogado) al represor Jorge Walter Pérez Blanco; hoy preso por crímenes de lesa humanidad.

Por otra parte, la presencia de seguridad privada nos preocupa porque significa la privatización de funciones específicas que corresponden a los trabajadores No Docentes de la propia Universidad.

Así lo establece el art. 49 de nuestro Convenio Colectivo de Trabajo (Decreto 366/06) y así las ejercen de manera absolutamente normal, compañeros No Docentes en otras Universidades del país.

Rechazamos la presencia de cualquier tipo de empresas privadas cumpliendo funciones que son propias de los No Docentes; porque constituyen un peligroso precedente que atenta contra nuestra fuente laboral.

A la vez, exigimos que nuestras funciones puedan ser desarrolladas en condiciones dignas de trabajo; respetando las normas de higiene y seguridad laboral; con capacitación específica en cada caso y que los cargos en nuestro sector sean cubiertos mediante la realización de los concursos correspondientes, tal como lo establece también nuestro Convenio Colectivo.

Finalmente, somos conscientes de la obligación y la responsabilidad que tenemos, de trabajar cotidianamente para potenciar el quehacer académico y científico de nuestra Universidad.

Pero también estamos convencidos que la Universidad Pública y en particular la Facultad de Humanidades, deben ser los ámbitos naturales donde discutamos; reflexionemos y asumamos tanto compromiso como nos sea posible; en relación con la pobreza, la marginalidad y la exclusión social que nos atraviesa.

De ninguna manera deberíamos cerrar las puertas a la realidad social puesta allí, de carne y hueso en la vida y los cuerpos de los chicos del pueblo que viven en la calle.

Rosario, Mayo 2008

Trabajadores de la UNR en el ETUN
Encuentro de Trabajadores de las Universidades Nacionales - ETUN


Tienda de Libros Radio Nizkor On-Line Donations

DDHH en Argentina
small logoThis document has been published on 20May08 by the Equipo Nizkor and Derechos Human Rights. In accordance with Title 17 U.S.C. Section 107, this material is distributed without profit to those who have expressed a prior interest in receiving the included information for research and educational purposes.