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26oct17
Quedó preso el mayor ícono de los manejos de fondos de la era K
Después de 28 años como funcionario público, después de administrar la mayor caja de dineros del Estado nacional y después de permanecer en la cima del poder durante las tres presidencias kirchnerista, Julio De Vido quedó preso ayer.
Su detención se produjo horas después de que la Cámara de Diputados, con la mayoría del bloque kirchnerista ausente en el recinto, aprobó el desafuero que había pedido la Justicia para avanzar en dos de las más de 100 denuncias por corrupción que lo involucran.
Entre 2003 y 2015, De Vido fue intocable. Y nunca había quedado detenido desde que, en 1989, asumió como director de Obras Públicas de la Municipalidad de Río Gallegos, cuyo intendente era entonces Néstor Kirchner. Desde ahí, lo acompañó como funcionario en todas sus gestiones.
El diputado del Frente para la Victoria-PJ, considerado por muchos un ícono de la corrupción K por su desempeño como jefe del disuelto Ministerio de Planificación durante las presidencias de Néstor Kirchner y Cristina Fernández, se entregó por su propia cuenta en los Tribunales federales de Comodoro Py, ubicados en el barrio porteño de Retiro.
Entró por la puerta de atrás, para no facilitar la foto que, en su opinión, pretendían sectores del poder: sacado de su casa esposado, con chaleco antibalas y casco. Horas después fue trasladado en una camioneta blanca con vidrios polarizados del Servicio Penitenciario Federal al hospital de la cárcel de Ezeiza, donde le realizarían estudios médicos. La Justicia y la custodia intentaron por todos los medios preservarlo de la prensa.
Allegados al exfuncionario, de 67 años, señalaron que en unos días pedirá prisión domiciliaria.
Un argumento para fundar el pedido es de la diabetes que sufre el exfuncionario.
"Mándenle champán a la doctora (Elisa) Carrió", dijo el diputado K al ingresar a los tribunales, en alusión a la fundadora de la alianza Cambiemos, que lo denunció en numerosas causas de corrupción y celebró la semana pasada, en el cierre de campaña, el pedido de desafuero con la frase: "ĦQué caviar, qué champán!".
"Que no me manden, porque no tomo alcohol", respondió en Twitter la diputada, que no habló en el recinto. "Ya hablé durante 14 años", le dijo a su compañero de bancada Fernando Sánchez, quien le preguntó si tomaría la palabra.
Fisuras
En la Cámara de Diputados la votación se realizó con 178 de los 257 diputados presentes. Terminó 176 a favor del desafuero y una abstención. Hubo un legislador presente que no aparece ni votando ni absteniéndose y que tampoco está identificado en el parte oficial del Congreso.
Antes del inicio de la sesión especial, el bloque Frente para la Victoria-PJ, que preside Héctor Recalde y responde directamente a Cristina Kirchner, resolvió no bajar al recinto para no "convalidar la persecución" judicial de la que, a su criterio, el exfuncionario está siendo víctima.
Entre ellos estuvo la única diputada kirchnerista por Córdoba que queda, Gabriela Estévez. Los demás fueron dejando esa bancada desde que Mauricio Macri ganó la presidencia en 2015.
Sin embargo, seis diputados del bloque K sí bajaron: el sanjuanino Ramón Alberto Tovares, quien en diciembre termina su mandato; su comprovinciana Daniela Castro, que fue reelegida; la chubutense Ana Llanos, que responde al gobernador Mario Das Neves; la tucumana Miriam Gallardo, esposa de César "Kelo" Dip, funcionario de Juan Manzur; y los rionegrinos Luis Bardeggia y María Emilia Soria.
Soria, reelecta en su provincia, fue la diputada más notoria del bloque K que votó en contra de De Vido y argumentó su decisión en el recinto: sostuvo que, a diferencia del pedido de expulsión por inhabilidad moral, frustrado en la sesión del 26 de julio pasado, esta vez el pedido de desafuero sí se ajustaba a la ley.
"Nací en una casa peronista y aprendí dos cosas: no renunciar a mis principios y dar siempre la cara", dijo Soria, la última diputada en hablar durante el debate.
También bajó al recinto el exintendente de la ciudad cordobesa de Villa Dolores, el radical K Juan Manuel Pereyra (Concertación Forja), quien logró su banca gracias al Frente para la Victoria y ahora responde a Juan Schiaretti.
Pereyra, quien como jefe municipal fue beneficiado directamente con obras durante la gestión ministerial de De Vido, se abstuvo de votar el desafuero.
"Me llama la atención que después de meses de estancamiento estos pedidos hayan llegado en tiempo electoral. Nada es casualidad", dijo Pereyra. "No defiendo ni ataco al diputado De Vido, cuestiono a un sector del Poder Judicial", completó.
El desafuero fue aprobado por Cambiemos, el massismo, el bloque justicialista y los trotskistas.
También por los diputados Andrés Guzmán y Ramón Bernabey, que fueron elegidos en las listas K y después de 2015 armaron un bloque propio y hoy responden a Schiaretti.
También votaron el desafuero legisladores que responden a los Rodríguez Saá; los socialistas; los de Libres del Sur; los santiagueños que responden a Gerardo Zamora; el triunviro de la CGT Héctor Daer; los misioneros del Frente Renovador de la Concordia, y los neuquinos del MPN, entre otros.
En cambio, no bajaron cinco del Movimiento Evita, que se alejaron de la bancada K luego de que se descubriera a José López intentando esconder bolsos con millones de dólares en un convento.
Antecedentes
Expulsiones y trabas. El de De Vido es el primero con la nueva ley de fueros.
Julio De Vido es el único legislador que ha sido desaforado con la nueva Ley de Fueros, sancionada en el año 2000.
2005. Luis Patti no llegó a asumir como diputado porque los miembros del Congreso, liderados por los kirchnerista, le impidieron asumir por carecer de "idoneidad moral". Dos años después, cuando Patti ya estaba preso, acusado por delitos de lesa humanidad, la Corte Suprema definió que el Congreso no tenía atribuciones para impedir su asunción.
Hubo intentos de expulsión. En 2003, la entonces senadora Cristina Fernández quiso expulsar a Luis Barrionuevo por inhabilidad moral, pero no logró los dos tercios. En 2002, Norma Godoy renunció y evitó ser desaforada tras haber golpeado a un movilero.
[Fuente: La Voz del interior, Córdoba, 26oct17]
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