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09ago08
Hay que terminar con la impunidad porque desorganiza las sociedades
Manifestó Rubén Chebaia, ex intendente de San Miguel de Tucumán. El abogado radical, hijo del empresario José Chebaia, desaparecido durante la última dictadura militar, estuvo presenciando ayer el juicio a Antonio Domingo Bussi.
En una charla exclusiva con TucumánHoy.com. Chebaia se refirió a la actuación Antonio Domingo Bussi, durante su intervención militar en la provincia y lo dicho por este, ayer, en el juicio.
¿Qué actuación les cabe a los médicos que dijeron que Bussi no podía asistir a la sala?
Hay que traer a los médicos que dijeron que Bussi no estaba en condiciones de declarar. El acusado demostró una lucidez pasmosa y una memoria iluminada. Entonces los facultativos, que dijeron que no entendía rápidamente las preguntas y demoraba en elaborar las respuestas, deben declarar ante el tribunal por falso testimonio.
¿Fue una estrategia de la defensa?
Si , quedó claro que era una estrategia de la defensa.
¿Qué conclusiones saca de las declaraciones que hizo Bussi?
Hemos tomado conocimiento que la orden y lista de detenciones estaba en manos de jefes militares el 28 de febrero de 1976 y , los que figuran en esa lista iban a ser capturados, como el dijo, el día D a la hora H. Un militar que toma conocimiento que está por destituirse un gobierno constitucional y no actúa como corresponde es cómplice de aquello que en el artículo 28 de la Constitución Nacional Infames Traidores a la Patria.También quedo claro que las personas capturadas, por los informes que surgían de los supuestos informes de inteligencia, de alcahuetes, la gente era privada de su libertad y de su vida por circunstancias no comprobables, no objetivas y sin posibilidad de defenderse.
¿Qué opina sobre lo que dijo sobre Guillermo Vargas Aignasse?
La calificación que hizo sobre el, diciendo que era un funcionario de segundo orden, no cabe porque era un Senador Provincial. Y decir que a una persona detenida , que tenía dolores, por las esposas, y por algún vendaje, estaba manifestándose libremente, no hay nadie ni nada en la doctrina universal que pueda asegurar que este hombre estaba manifestándose libremente, obvio que no y mucho menos cuando fue trasladado de la mazmorra policial a la cárcel. Está en claro que esta fuerzas del desorden, no del orden, estaban al mando directo de un jefe de Operaciones que manifestó no tener ningún límite y que podía disponer de todas las cosas inclusive de las instituciones. Sólo preservó el Poder Judicial por un hecho de control pero también podía eliminarlos. Era el único juez de un estatuto desconocido y de ese modo decía defender la constitución , la ley y la república. Es decir con las herramientas que la Constitución y la Ley condenan. Es un hombre desatado en su locura y pasiones. No se puede decir que del exceso de poder se recuperó la Constitución.
¿Porque continúa diciendo que fue una guerra?
Hay muchos militares en la argentina que libraron una guerra esto que ellos dicen no fue una guerra. No reúne ninguno de los requisitos de una guerra. La única guerra que ellos fueron se rindieron en inglés.
¿Es el enfermo imaginario?
Quiere generar una victimización. En varios pasajes, de su declaración, se advirtió sus respuestas espontáneas. Cuando estaba boqueando el martes pasado, durante la lectura de las acusaciones, era realmente un enfermo imaginario. Su enfermedad es una embriaguez de poder e impunidad. La impunidad desorganiza las sociedades por eso hay que terminar con ella.
[Fuente: Por Daniel A. Villalba, Tucumán Hoy, 09ago08]
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