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30may06
Bendini: quienes no aceptan las reglas "deben abandonar la Fuerza".
Sonó a ultimátum. "Lealtad, subordinación y disciplina son la columna vertebral del Ejército. Todos los militares en actividad y retiro están obligados legal y reglamentariamente a respetarlos. Quien no esté dispuesto a respetar esos valores debe abandonar la Fuerza", advirtió ayer el jefe del Ejército, Roberto Bendini, en su discurso por el Día del Ejército.
La ministra Nilda Garré le había pedido a Bendini que aludiera en su discurso a la situación planteada por la participación de militares en el acto de la Plaza San Martín, el 24 de mayo.
Seis oficiales en actividad fueron sancionados por haber concurrido allí, y de uniforme. Con 40 días de arresto fueron sancionados los capitanes Juan Lucioni, Santiago Listorti y Gabriel Oesquer, quienes el día del acto entregaron una placa de homenaje a las víctimas al general retirado Juan Giuliano. Recibieron 31 días el teniente primero Juan Ferrero y el teniente Andrés Gaspar. Al mayor Fabián Magnani, quien no fue pero se le adjudica responsabilidad por ser superior inmediato, se le aplicaron 20 días.
Los oficiales pertenecen todos a la misma unidad, la Compañía de Comandos 601, cuyo jefe es el mayor Magnani. Fuentes del Ejército admitieron que la preocupación habría sido mayor si hubieran provenido de distintas unidades. Así, creen que la cuestión quedó "focalizada". Consideran además que entre los capitanes -compañeros de promoción- influyeron lazos de amistad y "solidaridad" con Lucioni, hijo de un teniente asesinado en 1976 por Montoneros cuando salía de su casa. Ana, la otra hija, fue oradora del polémico acto.
El Ejército buscó aislar a los oficiales arrestados: los dispersó en distintas unidades, ninguna del arma de Infantería a la que pertenecen. Aunque sin extrapolar momentos tan distintos, observadores atentos recordaron que "los comandos" del Ejército, con Aldo Rico y sus seguidores, fueron protagonistas en los alzamientos carapintada de los años 80.
Bendini le dijo ayer a Clarín que "cuando se hacen homenajes sinceros de la familia o los compañeros, el Ejército es invitado y concurre a recordar a los muertos". Pero sostuvo que la convocatoria del 24 de mayo "se desvirtuó para convertirse en un acto político". Allí hubo gritos que lo acusaron de "traidor" y "lacayo".
Bendini reiteró que podría haber "sanciones mayores" a las ya aplicadas. Estas podrían alcanzar a seis coroneles retirados que fueron al acto de uniforme y también al general Giuliano, quien preside la Unión de Promociones y cerró la lista de oradores con críticas al Gobierno y una reivindicación a los militares presos por la represión ilegal.
Bendini dijo en su discurso en el Colegio Militar que "hemos asumido nuestro compromiso para que los desatinos del pasado no nos detengan y nos impidan construir el Ejército que la Nación necesita". E insistió: "No toleraremos acciones que pretendan apartarnos de ese rumbo."
[Fuente: Clarin, Bs As, Arg, 30may06]
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