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03jun06
Arslanián desplazó a 45 policías de la Bonaerense.
Ayer fue un día de movimientos dentro de la Policía bonaerense. En una primera resolución el ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, León Arslanián, declaró prescindibles a 45 efectivos de la fuerza. En una segunda resolución directamente exoneró al jefe y a un oficial de la Policía Comunal de Tres Arroyos. Desde que asumió, en abril 2004, Arslanián declaró prescindibles a 1.054 policías.
De acuerdo a la información oficial difundida por el Ministerio, en la lista de prescindibles están los responsables (el jefe y el subjefe) de la seccional 1ª de Florencio Varela en 2002. "Ese año allí fueron torturadas dos personas, una de las cuales, la joven Andrea Viera, murió a causa de los tormentos infligidos", dice el parte oficial.
Luego de una investigación de Asuntos Internos del Ministerio, por ese caso ya habían sido exonerados cinco policías, que están por ser juzgados. Ahora le tocó el turno a sus jefes que "si bien fueron sobreseídos por la Justicia penal (ya que no se determinó sus participaciones en los hechos) la extraordinaria gravedad de los sucesos muestra un defecto absoluto en el ejercicio de las funciones de control y conducción incompatibles con sus jerarquías", agrega el comunicado.
Otros policías prescindibles son los que "injustificadamente golpearon a un grupo de jóvenes de Avellaneda. Y también funcionarios de nivel de conducción policial, que reflejan un desinterés en la preparación para el ejercicio de las funciones propias de su grado jerárquico. Así muestran un desprecio a la ciudadanía que quiere un servicio de seguridad pública profesionalizado", concluye la información oficial.
Por otro lado Arslanián exoneró al ex jefe de la Policía Comunal de Tres Arroyos y a otro oficial. Los dos están acusados de pedir una coima de 6.000 pesos a un camionero a cambio de la promesa de influir sobre un fiscal para evitar una orden de detención en su contra.
La medida recayó sobre el inspector Carlos Alberto Faure y el oficial Nelson Gabriel Brito, quienes durante un operativo de control vehicular le habían retenido el vehículo al camionero porque presentaba irregularidades.
De acuerdo con la investigación realizada por la Auditoría General de Asuntos Internos de la Policía bonaerense, los policías le habrían pedido $6.000 al conductor del camión con el supuesto fin de influir sobre un fiscal de Bahía Blanca y evitar de esa manera que se librara una orden de detención por la infracción.
El conductor hizo una denuncia ante la Justicia de Bahía Blanca y allí se dispuso que el denunciante actuara como aceptando el soborno para atrapar a los policías "in fraganti".
[Fuente: Clarin, Bs As, Arg, 03jun06]
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