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28dic07
El grupo brasilero Votorantim compró el 27% de Acerbrag
La industria siderúrgica nacional sigue tiñéndose de banderas extranjeras. Ahora le llegó otra vez el turno a la brasileña. Es que ayer se informó que una empresa de ese país puso un pie en tierra argentina. El conglomerado Votorantim se hizo con el 27% de Acerbrag, la firma del grupo Lupier (familia Vara), una de las más importantes en la fabricación de hierro redondo, del que controla el 25% del mercado nacional.
Su producción alcanza los 250 millones de toneladas de barras de acero para hormigón armado, varillas, alambres, mallas de alambre y alarmón. Por su enfoque, es una clara competencia de Acindar, la siderúrgica fundada por la familia Acevedo que ahora es totalmente controlada por la india Arcerlor-Mittal.
Precisamente esta compañía (que por estos días está rescatando las acciones de Acindar que cotizan en el mercado para retirarla de la Bolsa) se hizo semanas atrás con otra compañía, Aceros Majdalani.
Como ni Votorantim ni AcerBrag tienen abierto su capital en Bolsa, no se informó el precio de la operación concretada ayer.
AcerBrag acusa ventas anuales por 150 millones de dólares, y el año pasado estuvo a punto de ser vendida a otro grupo brasileño, Gerdau, que había ofertado -finalmente sin éxito- 160 millones de dólares por toda la compañía. De ahí se infiere que la operación confirmada ayer por los brasieleños podría acercarse cómodamente a los 40/50 millones de dólares.
Carlos de Moraes, presidente del consejo de Votorantim Metais, dijo que la incursión de ese grupo en la Argentina debe leerse en el proceso de diversificación (geográfica y de negocios) que están encarando las compañías brasileñas.
Luisa Vara, titular de AcerBrag, hizo hincapié en el importante plan de inversiones desde que el grupo Lupier se hizo cargo de la compañía.
La misma Vara dejó bien claro por qué se avanzó en esta operación: "La alta concentración y volatilidad que tiene el sector del acero, atravesando una ola de fusiones y adquisiciones y acuerdos estratégicos, llevó a los accionistas a emprender tareas que permitieran explotar el buen momento que vive el sector".
La aparición en escena de Luisa Vara sugiere que se mantuvieron las diferencias dentro de la familia que impidieron la compra por parte de Gerdau. Es que el 27% de la empresa era propiedad de Luisa Vara, mientras que el otro 73% está en manos de la viuda, Liliana, y los hijos del fallecido Piero Vara, de los colchones Piero. El año pasado, los dueños mayoritarios se habrían opuesto a la venta. Por eso esta operación involucraría sólo las acciones de Luisa Vara.
En la industria siderúrgica local evaluaron la compra de Votorantim como un paso más en el proceso de consolidación del sector siderúrgico, que está ocurriendo a nivel regional y mundial. "Es un sector todavía muy atomizado, y la ola de fusiones tiene para rato, ya que la siderurgia tiene mucho camino por recorrer para igualar procesos similares que se produjeron en otros campos similares, como el aluminio, por ejemplo".
[Fuente: Clarin, Bs As, Arg, 28dic07]
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